Baños ecológicos para prevenir la desnutrición infantil

Indiana es uno de los trece distritos de la provincia de Maynas, en la región Loreto. En este distrito, desde marzo de 2014 el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en coordinación con la Municipalidad Distrital de Indiana, viene desarrollando el proyecto "Promoción del acceso a agua segura, saneamiento e higiene en la Amazonía peruana”, que comprende la instalación de "baños ecológicos" y acciones de sensibilización para promover prácticas saludables de higiene con el objetivo de prevenir la desnutrición infantil.

La asistencia técnica y los recursos para la construcción de los baños ecológicos son proporcionados por UNICEF, mientras que la municipalidad se encarga de su implementación y de las acciones de sensibilización a la población. Estos baños ecológicos, que han sido instalados en 21 comunidades (de las 62 que hay en Indiana) beneficiando a más de tres mil niños, son el primer modelo de intervención de este proyecto. En las cinco primeras comunidades que se intervino se busca que el 100 por ciento de las familias tenga en su vivienda un baño ecológico, mientras que en las 16 restantes este servicio se viene instalando fundamentalmente en las escuelas.  

El coordinador de Emergencias de UNICEF, José Vásquez, señala que el objetivo de los baños ecológicos es generar un cambio de comportamiento en la población, especialmente en los niños en relación a sus prácticas de higiene. “Las familias que no tienen un buen sistema de acceso a agua segura y saneamiento ponen en riesgo la salud de sus hijos. Trabajar estos temas es fundamental para combatir la desnutrición infantil. Con el lavado de manos, luego de utilizar los baños y/o antes de consumir los alimentos y beber agua segura, vamos a reducir los indicadores de desnutrición y otras enfermedades”. 

“Este modelo de baño ecológico debería convertirse en política pública, ya que el 100 por ciento de la población de estas comunidades necesita este servicio, porque son comunidades afectadas cada año por las inundaciones provocadas por la crecida de los ríos”, afirma José Vásquez.

Los baños ecológicos contienen un reservorio que captura el agua de la lluvia y que sirve para el consumo humano y el lavado de manos antes y después de usar este servicio. Asimismo, las excretas se almacenan en celdas que, cubiertas con aserrín, en el lapso de un año se convierten en abono utilizado para producir alimentos a través de biohuertos. El proyecto promueve que los padres les enseñen a los niños a producir alimentos en estos biohuertos. Toda la estructura de estos baños está elevada para no ser dañada por las inundaciones.  

A través de este proyecto, UNICEF brinda a la Municipalidad Distrital de Indiana las herramientas y la metodología para capacitar a la población en prácticas saludables de higiene. Para ello, la Gerencia de Desarrollo Social de esta municipalidad, personal del sector Salud y de la Red de Educación de Indiana, han conformado un comité que acude a las comunidades para capacitar a las familias sobre la importancia del buen uso y consumo del agua y así cambiar malos hábitos de higiene que afectan la salud, especialmente de los niños. 

Al respecto, José Vásquez resalta la importancia que la alcaldesa de Indiana, Janet Reátegui, ha dado a este proyecto. “La alcaldesa tenía claro que la higiene era un problema fundamental de la población de Indiana, especialmente de los niños, por ello, como parte del plan de la municipalidad para combatir la anemia y la desnutrición infantil, priorizó este proyecto. Al ver la solución que representaban los baños ecológicos, valoró esta iniciativa, ya que si bien no contaba con los recursos financieros para desarrollarla, sí contaba con un equipo que podía apropiarse de esta estrategia”.

 

Otro aspecto importante en la implementación de los baños ecológicos es que ante la falta de servicios higiénicos, los niños y niñas iban a zonas alejadas y poco transitadas para hacer sus necesidades, poniendo en riesgo su seguridad. “Con los baños ecológicos se está reduciendo el riesgo de abuso contra los niños y niñas, porque ya no tienen que alejarse de sus casas para hacer sus necesidades”, sostiene José Vásquez.