Especialistas opinan sobre desnutrición crónica infantil

Diversos especialistas consultados por el Blog Inversión en la Infancia opinan sobre los resultados de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar – ENDES 2010 publicados el pasado 10 de febrero, en los que se revela una mínima reducción en el índice nacional de desnutrición crónica infantil, que en el año 2010 bajó de 23,8 por ciento a 23,2 por ciento (según el parámetro de medición de la Organización Mundial de la Salud – OMS) y su incremento en varias regiones del país. Opinan Uriel García, ex ministro de Salud; Javier Abugattás, ex viceministro de Economía; y Carlos Eduardo Aramburú, antropólogo y especialista en desarrollo rural.

Uriel García

Uriel García, ex ministro de Salud.

Uriel García, quien fuera ministro de Salud en el segundo gobierno de Fernando Belaunde (1980-1985), indicó que el problema de fondo cuando se habla de desnutrición crónica infantil es “la pobreza y la falta de justicia social” que existe en el Perú. “Problemas como la desnutrición y la anemia infantil nacen de una patología de la pobreza, la que no se resuelve con pastillas, dietas o medicamentos, sino con justicia social”, precisa el doctor Uriel García.

 “¿Por qué no hacemos una encuesta en Las Casuarinas o La Molina, para conocer cuál es el nivel de desnutrición crónica en esos lugares? Veremos que, salvo excepciones, como por enfermedades hereditarias, por ejemplo, en esos lugares existe desnutrición crónica cero, porque ahí no hay pobreza. La causa de enfermedades como la desnutrición crónica se debe a la pobreza en la que viven muchas zonas del país. Para llegar a la desnutrición crónica cero primero tenemos que enfocarnos en luchar y erradicar la pobreza de nuestro país”, asegura Uriel García.

En opinión del ex ministro de Salud, la diferencia entre el alto crecimiento económico nacional y la mínima reducción en los índices de desnutrición crónica se debe a “una mala distribución de los recursos económicos por parte del Estado”. “Hay una concentración de la riqueza –agrega Uriel García- que está en manos de una minoría, en la que sí existe justicia social, que tiene buena vivienda, buena alimentación, seguro médico y que vive como en un país desarrollado, y al lado hay otro país al que no le llega nada de estos beneficios. No existe una política de redistribución eficaz de los recursos”.

Javier Abugattás

Javier Abugattás, ex viceministro de Economía.

Javier Abugattás, ex viceministro de Economía y catedrático de la Universidad Católica, señala que si bien los resultados de ENDES 2010 muestran una cierta tendencia a la reducción de la desnutrición crónica infantil, ésta es “insuficiente” para llegar a metas como la desnutrición crónica cero.

“El objetivo debe ser que no haya desnutrición crónica y al ver estos resultados uno debe preguntarse si lo que está haciendo el Estado es lo mejor que se puede hacer. Tenemos que saber las principales causas que impiden avanzar más en la reducción de la desnutrición crónica infantil y qué servicios que dependen directamente del Estado no están funcionando correctamente. La baja reducción de la desnutrición crónica infantil no se debe a una falta de recursos económicos, sino a una falta de claridad en las metas”, afirma Javier Abugattás.

“Sí es posible –agrega Abugattás- alcanzar la meta de desnutrición crónica infantil cero. Para eso hay que priorizar los programas estratégicos de salud materno-neonatal y de nutrición, tanto a nivel nacional, regional y local, pero sin descuidar los otros programas. Debe haber un seguimiento continuo de cómo se está avanzando en estos programas y qué es lo que se está haciendo para mejorar las cifras de desnutrición crónica infantil”.

Carlos Eduardo Aramburú, antropólogo y especialista en desarrollo rural.

El antropólogo y catedrático de la Universidad Católica, Carlos Eduardo Aramburú, indicó que si bien existe una tendencia a la baja, aunque mínima, en los índices de la desnutrición crónica infantil, lo preocupante son las grandes brechas que existen a nivel regional.

“Hay que recordar que la meta de este gobierno fue reducir la desnutrición crónica infantil a nivel nacional a un 16 por ciento (según el patrón de medición NCHS, de acuerdo al cual el promedio nacional es de 17,9%) y según estos resultados, sólo 8 regiones de las 24 han conseguido esta meta. Lo que debe preocuparnos es ver cómo reducimos las brechas regionales”, señala Carlos Eduardo Aramburú.

Según ENDES 2010, las ocho regiones que se encuentran debajo de la meta nacional siguiendo el patrón de medición de NCHS son Lambayeque (13%), Tumbes (9,5%), Arequipa (8,2%), Madre de Dios (7,8%), Ica (7,6%), Lima (6,2%), Moquegua (4,8%) y Tacna (2,4%).

Sobre la mínima reducción en los indicadores de la desnutrición crónica infantil en el año 2010, pese al crecimiento económico que tuvo el país ese año (que según el Instituto Nacional de Estadística e Informática - INEI llegó a 8,76%), Aramburú dice que “si bien existe una responsabilidad del gobierno al ser este un problema multisectorial que involucra a varios ministerios, como Salud, Economía, Vivienda y Educación, existen también una serie de factores culturales, como la higiene dentro de la familia, que no son fáciles de solucionar y que impiden que se pueda lograr un mayor avance en este tema”.