Gobiernos regionales piden mayor autonomía para el manejo de programas sociales

Los presidentes regionales de Apurímac, Elías Segovia, de Cajamarca, Gregorio Santos, de San Martín, César Villanueva, y la vicepresidenta regional de La Libertad, Mónica Sánchez, coincidieron en que que los gobiernos regionales y locales tienen un rol central en las políticas sociales de lucha contra la pobreza y atención a la primera infancia y que para cumplir ese rol deben tener una mayor autonomía en el manejo de estas políticas sociales, en el marco de un trabajo articulado entre el gobierno central, los gobiernos regionales y los municipios. También señalaron la importancia de establecer metas locales a favor de la infancia, en temas como desnutrición crónica infantil, educación y otros. Estas declaraciones las dieron en el programa Opinión, transmitido por Salgalú TV Online.

Elías Segovia señaló que si bien en el discurso de toma de mando del presidente Ollanta Humala éste expresó la voluntad política de su gobierno de darles mayor participación a los gobiernos regionales en la ejecución de los programas sociales, se requieren cambios, especialmente en el Ministerio de Economía y Finanzas, para llevar esta voluntad política a los hechos. “El Ministerio de Economía y Finanzas se ha vuelto un superministerio que hace todo y que perjudica la ejecución de algunos programas. Esto debe cambiar”, afirmó.

Para el presidente regional de Apurímac y director de la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales “el objetivo debe ser que cada región planifique su desarrollo”.

En el mismo sentido, Cesar Villanueva declaró que se debe plantear un proceso de descentralización política y fiscal. “Las primeras decisiones sobre la descentralización fiscal son fundamentales. Si no hay eso, las posibilidades de los gobiernos regionales es esperar el buen o mal humor del ministro de Economía”.

Gregorio Santos cuestionó la ley que obliga usar los recursos económicos del canon minero en obras de infraestructura, lo que les impide destinar esos ingresos al desarrollo social. Señaló que ése es un grave problema que enfrenta la región Cajamarca, la cual no puede destinar los importantes ingresos que recibe por el canon minero a programas de lucha contra la desnutrición crónica infantil –que en Cajamarca afecta a más del 40 por ciento de los niños menores de cinco años- ni a la contratación de maestros o médicos. Santos le pidió al gobierno central que cambie esta ley para que los ingresos del canon minero puedan ser usados en inversiones a favor del desarrollo social y de la infancia. “Ahora la mayoría de la inversión se da en bienes, no es una inversión productiva. Hay que pasar del gasto en infraestructura a tener un gasto social”, demandó Santos.

Las autoridades regionales coincidieron en señalar que es necesaria una mayor participación de los gobiernos regionales y locales en el diseño y ejecución de las políticas sociales, porque, aseguraron, son éstos los que conocen mejor las necesidades de la población.

“Los gobiernos regionales somos los que estamos más cerca de la población. La ejecución de algunos programas sociales podría ser responsabilidad de los gobiernos regionales, trabajando de forma articulada con el gobierno central y con los gobiernos locales”, afirmó Mónica Sánchez.


Acciones regionales a favor de la infancia

Las autoridades regionales que participaron en el programa Opinión también coincidieron en que además de las metas nacionales en temas como desnutrición crónica infantil o educación, cada región debe establecer sus propias metas locales.

Elías Segovia, presidente regional de Apurímac y director de la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales, aseguró que la atención a la familia y la infancia son prioridad en su gestión. “Basamos el desarrollo en la familia. Eso es básico para tener un niño en buenas condiciones emocionales. Los programas sociales tienen que estar dirigidos a la familia”, precisó Segovia.

En Apurímac la desnutrición crónica infantil afecta al 38,6 por ciento de los niños menores de cinco años, es decir a 21,239 niños, porcentaje bastante más alto que el promedio nacional de desnutrición infantil, que es de 23,2 por ciento. Segovia reveló que la meta de su gestión, que culmina el año 2014, es reducir ese nivel de desnutrición crónica infantil en más de 20 puntos porcentuales. “Nos hemos puesto la meta de reducir la desnutrición crónica infantil por debajo del promedio nacional, hasta llegar el 2014 a un 15 por ciento de niños con desnutrición, que nos parece una meta manejable, aunque, claro, lo ideal es llegar a desnutrición infantil cero”.   
César Villanueva, presidente de la región San Martín, aseguró que su gestión  pone énfasis  en  la educación y estimulación temprana de la primera infancia.  “La idea es coberturar a 52, 000 niños en la región, por lo que hemos puesto en funcionamiento programas de estimulación temprana”.
 
Respecto a la desnutrición crónica infantil, que en San Martín afecta al 26,8 por ciento de los niños menores de cinco años (26,724 niños), Villanueva señaló que la meta de su gobierno es bajar en al menos diez puntos porcentuales ese nivel de desnutrición infantil para llegar a 18 por ciento al final de su gestión el año 2014.
Gregorio Santos, presidente de la región Cajamarca, donde la desnutrición crónica infantil es del 40,5 por ciento (73,759 niños menores de cinco años) también señaló que la meta de su gestión es bajar la desnutrición infantil en al menos diez puntos porcentuales hasta el 2014.

El presidente regional de Cajamarca mencionó como una prioridad de su gestión mejorar la educación de la primera infancia. En Cajamarca el 57,9 por ciento de los niños menores de cinco años (64,170) no recibe educación inicial. “Hay que ampliar la cobertura de educación inicial. Tenemos un proyecto de acompañamiento a docentes para mejorar la calidad educativa. La idea es ver in situ cómo va la educación inicial”, aseguró.

Por su parte, Mónica Sánchez, vicepresidenta de la región La Libertad, reconoció que pese al crecimiento económico de esa región, la desnutrición crónica infantil es un problema grave en las zonas andinas rurales de La Libertada, ya que en algunas de esas provincias la desnutrición supera el 60 por ciento. Frente a esa realidad, Sánchez aseguró que el gobierno regional ha priorizado el combate a la desnutrición infantil, para lo cual, dijo, va a trabajar de manera conjunta con el gobierno central.