Es un avance, pero no es suficiente: La primera infancia en la agenda política y electoral

¿Qué tan presente ha estado el tema de la primera infancia en la agenda de la coyuntura electoral?, es una pregunta que debemos hacernos en estos momentos que la campaña por la presidencia llega a su fin. La inversión en la primera infancia es clave para el futuro del país, para un desarrollo sostenible, pero es un tema que no suele estar en un lugar privilegiado en la lista de prioridades de los políticos. Es una inversión a largo plazo, tal vez por eso los políticos prefieran priorizar otros temas y otras ofertas que piensan les pueden dar réditos en el corto plazo.

Sin embargo, en esta campaña electoral hemos visto una señal, un avance respecto a la importancia que los candidatos le han dado a la primera infancia. En anteriores procesos electorales este tema ha estado ausente del escenario, pero en esta ocasión sí ha sido abordado más específicamente por los candidatos. Tal vez no en el lugar prioritario que debería tener un tema de tanta importancia para el país, pero al menos hemos escuchado propuestas a favor de la primera infancia como no lo habíamos hecho en anteriores contiendas presidenciales.

Esto es un avance, pero creemos que no es suficiente. Por eso, nuestra responsabilidad de no bajar la guardia, debemos seguir insistiendo para que el tema de la primera infancia sea tomado con la seriedad y prioridad que el asunto merece por quienes pretenden gobernar el país.  

Se habla mucho de cifras macroeconómicas y de crecimiento, pero poco de desarrollo humano. A pesar de algunos avances que se han dado en esta área,  no podemos dejar pasar algunos datos sobre la situación de la primera infancia: En el Perú hay aproximadamente 3 millones 500 mil niños menores de cinco años, de los cuales prácticamente la mitad (49%) vive en pobreza y el 19% en extrema pobreza. Esto significa que hay más de 1 millón 700 mil niños en nuestro país que viven en la pobreza y 665 mil en extrema pobreza.

Hay 753 mil niños menores de cinco años que sufren desnutrición crónica y 963 mil niños entre 6 y 36 meses que tienen anemia, lo que afecta irremediablemente su desarrollo físico y mental. De otro lado, hay 785 mil niños entre 3 y 5 años que están al margen del sistema educativo.

Estos datos, que podemos encontrar revisando el Infobarómetro de la Primera Infancia (inversionenlainfancia.net/infobarometro), son un llamado a la reflexión y a la acción urgente a favor del desarrollo de la primera infancia, un tema que, por su trascendencia, debe estar en el primer lugar de nuestras prioridades. 

Si hay algo que resaltar en todo este proceso, es la acción articulada, el esfuerzo común de varias personas, instituciones como la Mesa de Concertación para la Lucha contra la Pobreza (MCLCP), Redes de Infancia, como también el trabajo persistente del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia para colocar el tema de la primera infancia en la agenda política y electoral que han jugado un papel importante para que en esta campaña las propuestas para la atención y el desarrollo de los niños hayan tenido una mayor presencia que en anteriores procesos electorales.

En esa tarea de posicionar el tema de la primera infancia en la agenda electoral y en la preocupación de los dos candidatos a la presidencia, el Grupo Impulsor Inversión en la Infancia convocó a ambos a un diálogo sobre sus propuestas de políticas públicas para la atención y desarrollo de la primera infancia.

Ollanta Humala, de Gana Perú, asistió a este diálogo el 16 de mayo. Fue una conversación importante y a la vez inédita en una campaña electoral, ya que nunca antes un candidato a la presidencia había asistido a una presentación pública para hablar exclusivamente sobre la primera infancia. No obstante, pese a la convocatoria a ambos candidatos y, a la confirmación de la candidata Keiko Fujimori, lamentablemente este encuentro no se concretó.

El próximo gobierno debe tomar como una prioridad las políticas públicas a favor de la primera infancia. En eso no debe haber discusión. Cambiar las alarmantes cifras que hemos mostrado aquí requiere una decidida voluntad política. Y la sociedad civil debe permanecer vigilante para exigir que se tomen las acciones necesarias, para participar y monitorear el cumplimiento de los compromisos a favor de la atención y desarrollo de la primera infancia que se adoptaron en la campaña electoral. 

Tenemos la responsabilidad de exigir y vigilar el cumplimiento de las promesas y compromisos. Como dice nuestro querido Gastón Garatea, no podemos desistir de nuestro “derecho al pataleo”. 



Salvador Herencia, miembro del Grupo Directivo de la Secretaría Técnica del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia y director de Salgalú Comunicación & Responsabilidad Social.