Impacto del cambio climático pone en riesgo seguridad alimentaria en el Perú

De acuerdo al Informe sobre Desarrollo Humano Perú 2013 “Cambio climático y territorio: Desafíos y respuestas para un futuro sostenible”, presentado el 28 de noviembre por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), los efectos del cambio climático ponen en riesgo la seguridad alimentaria en el país, al afectar la producción de alimentos. Entre la población vulnerable que se verá más perjudicada por esta situación están los niños.

Este estudio señala que el cambio climático incide sobre la disponibilidad de alimentos, pues impacta sobre cultivos y tierras agrícolas, o sobre especies hidrobiológicas. La disponibilidad de alimentos provenientes de la agricultura y la pesca, señala el informe del PNUD, puede verse seriamente afectada por la vulnerabilidad de los ecosistemas y del recurso hídrico.

La coordinadora residente del Sistema de las Naciones Unidas en Perú, Rebeca Arias, señaló que “el cambio climático está cambiando la vida de las personas, sobre todo de la población más vulnerable, como la primera infancia, ya que está afectando la producción agrícola, pesquera y ganadera. Esto tiene un impacto sobre la nutrición, ya que se traduce en una disminución de la disponibilidad de alimentos. El riesgo es que aumenten los índices de desnutrición crónica infantil”.

“Otro impacto del cambio climático se da en la salud, ya que debido al aumento de la temperatura se incrementará la incidencia de enfermedades como la malaria y el dengue, que tienen su impacto más fuerte en la población más pobre y vulnerable. Por ello, es importante analizar los impactos del cambio climático sobre el desarrollo humano para ver estos efectos, pero también para que se tomen medidas de adaptación y mitigación al cambio climático”, afirmó Rebeca Arias.

El coordinador del Informe sobre Desarrollo Humano del PNUD, Francisco Santa Cruz, indicó  que “la primera infancia, los niños en sus primeros años de vida, que son los más vulnerables, sería el primer sector en ser afectado por el cambio climático”.   

“La nutrición está vinculada a la seguridad alimentaria, a la disponibilidad alimentos, y en este país,  los principales productores de alimentos son de la pequeña agricultura, y una buena parte de ella está en zonas andinas donde ya se está sintiendo el impacto del calentamiento global, con la presencia de plagas y una incertidumbre notable por el régimen de lluvias. Más de la mitad de esa pequeña agricultura alimentaria es todavía de secano (que utiliza únicamente el agua que proviene de la lluvia), de acuerdo al último censo agropecuario, por tanto está vinculada a esta incertidumbre vinculada a si habrá o no lluvia”.  

Por ejemplo, señala Santa Cruz, “en los bosques de las comunidades nativas amazónicas, las sequías, pero también la deforestación y la contaminación han reducido la disponibilidad de alimentos, que es un refugio que normalmente tienen las comunidades. Es decir, hay un peligro de riesgo alimentario y nutricional porque sus principales fuentes están seriamente amenazadas por prácticas contaminantes y depredadoras, a las que se agrega la sequía y la inestabilidad del régimen hidrológico de la amazonia”.

En el caso de Madre de Dios, afirma Francisco Santa Cruz, en los niños de 4 y 5 años la presencia de mercurio en su organismo es proporcionalmente mayor que en los adultos, y eso esa es una situación de enorme alarma.

Por su parte, el ex viceministro de Energía, Pedro Gamio, indicó que “el aumento de la temperatura a nivel nacional representa un impacto que afecta a los más vulnerables que son los niños.  Por ejemplo ha habido pérdidas de zonas de cultivo por ausencia de agua, como la que se ha dado en el Callejón de Huaylas. No hay seguridad alimentaria sin seguridad energética y la seguridad energética tiene que ver con reducir nuestra dependencia a formas de generación que contaminan”.