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ENTREVISTA
Padre Gastón Garatea, miembro del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia“Hay que declarar en estado de emergencia la salud de los niños”Miembro directivo del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia, el padre Gastón Garatea habla sobre lo que espera del 4to Encuentro Nacional por la Primera Infancia, organizado por esta iniciativa ciudadana. Reflexiona sobre la situación de los niños, la falta de conciencia en las autoridades y la población acerca de la importancia de terminar con males como la anemia y la desnutrición y atender a la infancia para asegurarle un pleno desarrollo. También señala lo que debería hacer el gobierno en este tema.
Estamos a pocos días del 4to Encuentro Nacional por la Primera Infancia. ¿Cuáles son sus expectativas sobre este encuentro?
Espero que sea un encuentro de mucha esperanza. Que hagamos algo por los niños. A pesar que se han hecho cosas por la infancia, estos últimos cinco años han sido malos. Aún no se ha tomado conciencia del daño que causan la anemia y la desnutrición en los niños. Somos un país que tiene cerca de un millón de niños anémicos y más de 380 mil niños con desnutrición, esa es una desgracia habiendo plata en el Estado. Hay que seguir gritando contra esto, porque esta es una situación de emergencia que no se ha atendido. Se acaba de declarar en emergencia el sector Salud, esto significa que la atención en salud no funciona, dentro de esto la lucha contra la anemia y la desnutrición, la vacunación a los niños. Esto también demuestra que el sector Salud está abandonado.
¿Cuál es la importancia de este 4to Encuentro Nacional por la Primera Infancia?
La importancia es que sigamos gritando, sigamos levantando la voz para que se oiga que la infancia está mal. No creo en eso de que los niños son solamente el futuro del país, ellos también son el presente. Los niños tienen derecho a ser felices hoy. Es un crimen que muchos funcionarios no hagan nada por mejorar la situación de la infancia. A veces los funcionarios no son conscientes del daño que sufren los niños anémicos. Este encuentro nos ayudará a tomar conciencia y se sepa qué hacer para mejorar la atención a la infancia.
¿Por qué en el Perú hemos llegado a esta situación en la que hay cerca de un millón de niños con anemia y más de 380 mil con desnutrición?
Hace 15 años estábamos peor, ahora hemos tomado mayor conciencia de lo que pasa. No creo que antes se haya luchado más por la infancia, creo que ahora estamos en el mejor momento de la lucha contra la infancia, pero falta mucho por hacer. En la medida que uno empieza a atender un problema ve la real situación del problema. Entonces, uno se da cuenta que la anemia y la desnutrición tienen que ver con el acceso a agua potable, saneamiento, entre otros temas. Se requiere una atención integral. Quiero enfocarme en pelear por un tema: la anemia infantil, porque sé que para enfrentar la anemia también se tienen que atender los otros problemas. No se puede luchar contra la anemia solo con micronutrientes, se tiene que trabajar más integralmente. Así se arreglarán las cosas.
La situación de la infancia no solo es culpa del Estado…
El Estado ha sido medio cochino cuando ha dicho que la culpa es de los padres de familia, es verdad que los padres tienen culpa, pero muchos padres no tienen culpa porque les falta información y educación y no se dan cuenta de lo que significa la anemia y la desnutrición con algo que perjudica el desarrollo de sus hijos. Y es el Estado quien tiene la obligación de brindar la educación que la población necesita y hacer que ésta tenga conciencia de lo que está pasando. Creo que el Estado es el gran culpable en esto.
¿Cuál sería el rol de los padres?
Los padres deberían realizar una vigilancia a la vida de sus hijos, cómo los niños van progresando o no, y cómo se van haciendo cada vez más sujetos de atención. Todos tienen que involucrarse en la atención de los niños. Los ministerios tienen que involucrares en esto, el Ministerio de Salud no se puede manejar lejos de esto; el MIDIS (Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social), Vivienda, Educación, todos los ministerios tienen que involucrarse.
¿Qué hacer para que la infancia sea una política de Estado y tenga continuidad en las políticas de las autoridades?
Creo que hay que gritar la situación de la infancia. En este país el que no llora, no mama. Y también ha que gritar con todo el que se pueda hablar. Es un objetivo del Cuarto Encuentro Nacional por la Primera Infancia.
En ese sentido, ¿es necesario contar con una autoridad visible y responsable para la atención de la primera infancia que coordine y articule todas las políticas y acciones?
Nosotros, como Grupo Impulsor Inversión en la Infancia, hemos pedido muchas veces que se forme una autoridad para la primera infancia para mejorar su atención, y nos ha dicho que no. Este nuevo primer ministro (Fernando Zavala) nos dijo que no, porque habían otras formas. Respeto que tenga otra visión. Esperamos que haya alguien que dirija cómo se invierte el dinero a favor de la infancia. Si es una o muchas personas, no importa, lo importante es que se haga. Ahora nos toca pelearle al primer ministro que cumpla lo que dijo, en el sentido que se iba a mejorar la articulación de las acciones a favor de la infancia y la situación de los niños con otras formas que no sea esta autoridad para la primera infancia, porque él reparte el juego entre los ministros.
Tengo mucha esperanza. Ha entrado una ministra de Salud (Patricia García) que es realmente enérgica, una mujer que tiene una visión de la salud social, eso es algo muy importante. Y se ha dado cuenta que el sector Salud estaba medio muerto, se hacia lo mínimo y todo el mundo tranquilo. Creo que hay otros ministerios que también están tomando conciencia del tema de la infancia. Confío mucho en la ministra de la Mujer (Ana María Romero-Lozada), que también tiene que ver con los niños, en la ministra de Justicia (Marisol Pérez Tello), que también tiene que ver con esto, en la ministra de Desarrollo e Inclusión Social (Cayetana Aljovín), que ha hecho algunas cosas, pero que se queda en las estadísticas, hay que pasar a la acción. Tenemos muchas posibilidades de actuar bien. No he hablado con el ministro de Educación (Jaime Saavedra), pero hay que moverlo en los temas de infancia.
¿Cuál es el rol de los gobiernos regionales y locales en la atención a la infancia? Ellos son las piezas claves. Pero los ministerios también son muy importantes, porque envían a su gente a las regiones. Los gobiernos regionales todavía no funcionan bien en el país, aunque hay algunos que sí, como, por ejemplo, el caso de Piura, donde se creó un sistema de atención para los niños (Sistema Regional de Atención para la Primera Infancia), pero otros todavía no han tomar conciencia sobre la importancia de atender a la infancia. Hay gente que se va despertando, algunos hacen algo, pero la mayoría no.
¿Diría que los gobiernos regionales y locales todavía piensan primero en las obras de fierro y cemento antes que invertir en desarrollo humano?
Eso es evidentemente. Lamentablemente todavía es así. Es que piensan políticamente en votos, si son o no son reelegidos, y piensan que las obras de fierro y cemento, que se ven en el corto plazo, les dan más puntos políticos que acciones a favor de los niños, del desarrollo humano, cuyos resultados no son tangibles en el corto plazo.
¿Cuáles serían las acciones urgentes que debería asumir este gobierno para mejorar la situación de la infancia?
Hay que mejorar los desayunos, los almuerzos, que se les brinda a los niños por parte del Estado. No se trata de dar solo chispitas (micronutrientes para evitar la anemia) una vez, hay que acompañar esto con un conjunto de medidas. Una cosa que es muy nutritiva para los niños es la sangrecita, que es barata. También tenemos que masificar la quinua, que es un alimento bueno. Hay que hacer grandes paquetes nutritivos para los niños y mantenerlos varios años para que la infancia crezca bien.
Otro aspecto de la infancia que también se verá en el Cuarto Encuentro Nacional por la Primera Infancia es la educación inicial. ¿Cómo ve su situación?
Estamos mal. Nos faltan miles de profesores especializados en educación inicial. El rol de los profesores en el desarrollo de los niños es clave. El profesor también puede recomendar lo que pueden y deben comer los niños.
¿Cómo ve las metas que se ha planteado el gobierno sobre la salud de la infancia: eliminar la anemia como problema de salud pública para el 2021 y reducir la desnutrición de 14 a 8 por ciento para ese año? ¿Son metas poco ambiciosas?
Los niños de aquí al 2021 se habrán muerto como pajaritos. Se tiene que hacer algo ahora. No podemos esperar al 2021. Hay que declarar en estado de emergencia la salud de los niños y solucionarla hoy.
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