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ENTREVISTA
Congresista Marisol Pérez Tello“De qué nos sirve crecer un 6 por ciento al año si no somos capaces de eliminar la desnutrición y la anemia infantil”"Son una vergüenza las cifras de muertes por frío en nuestro país. Esto no es nuevo, el friaje y las heladas son la historia de todos los año", afirma la congresistas Pérez Tello al referirse al proyecto Casitas Calientes. Este año las zonas alto andinas del país han enfrentado una emergencia por el frío y la nevada, pero todos los años mueren centenares de niños a causa de las bajas temperaturas (ver datos en nota “Proyecto Casitas Calientes fue presentado al Congreso). ¿Cuál es su opinión de esta situación? Son una vergüenza las cifras de muertes por frío en nuestro país. Esto no es nuevo, el friaje y las heladas son la historia de todos los años, los cerca de 400 niños que mueren por frío cada año es algo que se repite todos los años, las fotos solidarias con la ropa y las frazadas son sólo eso: las fotos de cada año. Pero no se enfrenta el problema real de los niños que mueren por nuestra desidia y falta de solidaridad. No puede ser que por esta razón hayan muerto más de ocho mil niños en los últimos veinte años porque el Estado simplemente no tomó las medidas de prevención que debía de haber tomado. Hay que darle al tema del frío la importancia que tiene y trabajar juntos. ¿Cómo ve el proyecto “Casitas Calientes”, que se implementa en la provincia de Carabaya, en Puno, para terminar con las muertes a causa del frío, y que ha sido presentado por la Asociación Salgalú para el Desarrollo ante la Comisión de Inclusión Social del Congreso? Felicito a los impulsores de este proyecto. Miembros de la Comisión de Inclusión Social vamos a viajar en la última semana de setiembre a Carabaya para ver personalmente el proyecto “Casitas Calientes” y conversar con los pobladores de esas comunidades. Si la Comisión de Inclusión Social del Congreso, terminado su período, logra al menos que se destinen 200 mil o 400 mil dólares para la construcción de más Casitas Calientes en Puno, creo que la existencia de esta comisión habrá estado totalmente justificada. Hace unos días el Grupo Impulsor Inversión en la Infancia organizó el encuentro “Alerta Ciudadana por la Primera Infancia”, donde se señaló que el último año la anemia infantil se ha incrementado y la desnutrición crónica infantil ha disminuido a un ritmo menor del esperado. ¿Cuál es su sensación frente a esta situación que afecta a la primera infancia? La situación de la primera infancia es un tema que debería preocuparnos a todos, no es un tema solamente de los políticos. Un país que crece en el orden del 6 por ciento anual y no puede reducir sus niveles de desnutrición y anemia infantil no tiene el foco en una mirada necesaria para un país diferente en el largo plazo. Tenemos que darnos cuenta que la atención a la primera infancia es el punto de partida para la transformación de un país en crecimiento que tiene que generar condiciones de igualdad entre hombre y mujeres, pero también condiciones de igualdad entre las personas que viven en las zonas rurales y las zonas urbanas, en la sierra, selva y costa. ¿No se le está dando al tema de la primera infancia la importancia que debe tener en la agenda del país? Me preocupa mucho de que los temas medulares que ciertamente van a transformar nuestro país no se están atendiendo con prioridad. Preocupa la falta de conciencia nacional sobre esto. Por eso, la alerta que ha lanzado el Grupo Impulsor Inversión en la Infancia sobre la situación de la primera infancia en el país y para que este tema se ponga como una prioridad en la agenda nacional, se justifica plenamente. El 30 de agosto el Ejecutivo presentó al Congreso el Presupuesto de la República para el año 2014; veremos cuáles son las modificaciones que hay que hacer a ese presupuesto y por qué tenemos que pelear. Hago un llamado a la ciudadanía responsable para que nos ayude en la tarea de poner en el debate nacional los temas importantes, como el de la primera infancia. ¿Una primera pelea en el Congreso cuando se vea el Presupuesto de la República del año 2014 es evitar recortes en los programas sociales dirigidos a la primera infancia? Sí, así es. En derechos humanos, básicamente estos programas para la primera infancia atienden a eso, hay una cosa que se llama el principio de progresividad y de no regresividad, que supone que una medida siempre tiene que evolucionar hacia arriba, no puede estancarse y muchísimo menos retroceder. Si se reduce el presupuesto para los programas dirigidos a la primera infancia, eso implica un retroceso en la garantía de un conjunto de derechos a la población, y en ese caso no estaríamos yendo solamente contra los niños afectados y contra la Convención de los Derechos del Niño que el Perú ha suscrito, sino también contra toda la lógica del derecho internacional. Ahora, si el Estado me demuestra que en acceso a la identidad, por ejemplo, se ha hecho un buen trabajo de identificación y la cantidad de niños no registrados ha disminuido significativamente y ahora se necesita menos presupuesto para garantizar ese derecho, entonces puede darse una reducción presupuestal en ese programa. Pero en temas como anemia, desnutrición, vivienda, agua potable, el presupuesto no solamente no debe disminuir, sino que debe incrementarse, de manera que se puedan cubrir las necesidades. Marisol Pérez Tello indicó que "hay consenso entre distintos economistas y científicos sociales de que la inversión en la primera infancia es fundamental para terminar con la pobreza" Falta todo, en realidad. Voy a poner un ejemplo: la voluntad política puesta en manifiesto por el presidente de la República para combatir la leucemia infantil, dicha en un discurso presidencial en el año 2012, anunciando la creación de un hospital de trasplante de médula, ha tenido trabas burocráticas que han impedido que hasta el día de hoy se efectúe un trasplante de médula en nuestro país. Tenemos una serie de problemas, no solamente falta de voluntad política, que es, ciertamente, el más grave, porque cuando la voluntad política existe lo que hace es regar esa voluntad hacia abajo para que se concrete. Muchas veces hay deficiencia del funcionario público que tiene que llevar a cabo el mecanismo concreto de la aplicación de la política pública, por eso es tan importante la creación de una conciencia ciudadana de que existen políticas y programas que tienen que darse y que los ciudadanos reporten en sus distritos, municipalidades, provincias, regiones, cuando estos programas y políticas no se están llevando como debiera ser para poder nosotros, como Congreso, hacer el trabajo de fiscalización que corresponde. Creo que ha llegado el momento de dejar de especular sobre los deberes o los documentos escritos y comenzar a actuar. Hay que llevar los compromisos a la práctica, hacer seguimiento de esos compromisos y denunciar cuando esos compromisos son incumplidos. ¿Qué le toca hacer al Congreso? Tenemos tres roles concretos: legislar, fiscalizar y el de representación. En legislación, lo urgente es que no se retroceda en las asignaciones presupuestales, salvo, como señalaba anteriormente, que una disminución en el presupuesto tenga un correlato con el cumplimiento de metas que haga innecesaria que se mantenga la misma asignación presupuestal. Eso es lo primero. Lo segundo es aprobar el Código de los Niños, Niñas y Adolescentes, que es un tema pendiente. En fiscalización, hay que fiscalizar los programas vinculados a la niñez, ver cómo se están desarrollando, cuál es el ente que se está encargando de estos presupuestos. En representación, no me puedo comprometer por todo el Congreso pero sí lo puedo hacer por mí misma, hay que seleccionar un tema y hacerle seguimiento para ver qué está pasando. Pido púbicamente al Grupo Impulsor Inversión en la Infancia que me ayude a identificar un tema específico con una meta concreta a favor de la infancia para trabajar en eso y dentro de un año poder decir: ‘trabajando juntos, la sociedad civil, el Congreso, las autoridades, hemos conseguido revertir esta situación concreta’. Un tema clave es anemia y desnutrición crónica infantil. El Grupo Impulsor Inversión en la Infancia ha planteado como meta nacional lograr anemia y desnutrición infantil cero para el 2021, año del Bicentenario. ¿Esa meta le parece factible? Por supuesto que es una meta factible, sino de qué nos sirve crecer un 6 por ciento al año si no somos capaces de eliminar la desnutrición y la anemia infantil. Hay que echarnos a andar y caminar a paso firme. ¿Le parece injustificable que con el nivel de crecimiento económico que durante una década ha tenido el Perú todavía tengamos altos niveles de desnutrición y anemia infantil? Sí, eso es absolutamente injustificable. No han mejorado significativamente los índices de desnutrición y anemia infantil, por eso es injustificable una reducción presupuestal en los programas para combatir estos problemas. Un cuestionamiento que se hace a la clase política es que asume compromisos verbales a favor de la infancia que se quedan solamente en eso y no se comprometen con acciones concretas a favor de la niñez porque consideran que no es rentable políticamente en el corto plazo… Creo que pensar que el trabajo por los niños no es rentable es una miopía. Hay muchas congresistas, hombres y mujeres, que trabajan el tema de niñez, quizá lo que falta es una mejor articulación. Hay sectores del Estado que ven cada uno por su lado algunos de los temas vinculados a la primera infancia, pero no hay una mirada transversal que pueda combatir integralmente problemas como desnutrición. Al no tener la primera infancia un ente rector no se visibiliza la problemática de la primera infancia y no se sabe a quién acudir. Hay que solucionar esa falta de articulación y visión transversal. Pero en el camino hay que echarnos a andar. En lo personal yo he asumido el compromiso de fomentar el tratamiento del tema de la niñez en el debate parlamentario y en cada foro público que haya. Hay consenso entre distintos economistas y científicos sociales de que la inversión en la primera infancia es fundamental para terminar con la pobreza y para la inclusión social. ¿Qué se está haciendo, y qué se debe hacer, desde la Comisión de Inclusión Social del Congreso, que usted integra, para promover políticas a favor de la primera infancia? En la Comisión de Inclusión Social se ha creado un sub grupo de trabajo para seguir la problemática de inclusión social en primera infancia. Es importante que desde la Comisión de Inclusión Social pongamos el acento en los temas donde todavía falta implementar una política pública eficiente y debatamos el tema de la primera infancia con responsabilidad. "Me preocupa mucho de que los temas medulares que ciertamente van a
transformar nuestro país no se están atendiendo con prioridad", señala
Pérez Tello. Este diálogo se ha programado en dos aspectos: uno político y otro programático. En la conversación en la que participó el PPC, en el aspecto político se han tocado tres temas: elevar el tema del diálogo político, que va a permitir tocar temas como el de la infancia, en lo que nadie racionalmente podría estar en contra; segundo, un tema de institucionalidad y lucha contra la corrupción, institucionalidad que tiene, por ejemplo, que ver con que exista un ente que pueda hacer un seguimiento a las políticas públicas en materia de niñez al cual podamos recurrir para ver políticas, indicadores, para denunciar incumplimientos; el tercer tema está vinculado con la posibilidad que tiene el gobierno de mirar el largo plazo, y el largo plazo supone políticas concretas en materia de niños. El tema de la infancia no se ha planteado como un punto especifico porque en este diálogo no se ha plantado ningún punto como especifico; ha sido una mirada general. Mencionó el Código de los Niños y Adolescentes, cuya modificación está pendiente en el Congreso. Hay preocupación respecto a la propuesta de un nuevo Código planteada en el Congreso que implica una serie de retrocesos en términos de derechos. ¿Cuándo se verá este tema en el pleno del Congreso? Me inhibí el año pasado, cuando era presidenta de la Comisión de Justicia, de llevar adelante el debate de este Código porque siendo presidenta debía sustentar un pre dictamen que ya estaba hecho y con el cual yo no estaba de acuerdo e iba a entrar en una contradicción, La Comisión de la Mujer también ha hecho un pre dictamen. Mis expectativas sobre lo que creo que debe ser un Código para los niños, niños y adolescentes no se cubren con las propuestas que existen en el Congreso. Ahora que yo ya no estoy en la presidencia de la Comisión de Justicia se ha pedido nuevamente que se toque el tema; espero que corrijamos los problemas que existen, como, por ejemplo, que el niño sea efectivamente un sujeto de derecho, que es un tema que hay que aclarar; el tema de los castigos corporales, que no se prohíben expresamente en la propuesta existente; el tema de educación sexual, que es muy importante y que no tiene que ver con fomentar las relaciones sexuales; el tema de menores infractores también tiene que ser enfrentado con mayor seriedad; y el Código debe tener un lenguaje de género e inclusivo, que en la propuesta existente no tiene, propuesta que habla de niños y adolescentes y hay que hablar de niños, niñas y adolescentes. |