La violencia contra la infancia es altamente aprobada por las madres como una forma de corrección

De acuerdo al estudio “La violencia infantil y el entorno doméstico: Puntos de partida para una propuesta de prevención en Huancavelica”, del Instituto de Estudio Peruanos (IEP), la violencia contra la infancia “es una práctica altamente aprobada por las madres como forma de corrección”. Este estudio ha sido realizado por Patricia Ames y Úrsula Aldana, investigadoras principales del IEP.

Entre los resultados de este estudio, que se llevó a cabo con 500 familias del distrito de Seclla, en la provincia de Angaraes en la región Huancavelica, el 73 por ciento de las madres dijo estar de acuerdo con el uso de la violencia psicológica y el 45 por ciento con el uso de la violencia física, como formas de corregir a sus hijos.

El estudio fue presentado el 28 de abril. Entre sus conclusiones se señala que de los cuidadores de los niños (madres, otras familiares y en algunos pocos casos los padres) que se expresaron en contra de la violencia y aseguraron que se debe corregir hablando con el niño, el 48 por ciento terminó usando la violencia psicológica y el 32 por ciento la violencia física contra los niños.

Al ser consultados sobre las formas más usuales de castigo a los niños, el 56 por ciento de los cuidadores (la gran mayoría mujeres) afirmaron hacerlo llamándoles la atención con gritos y un 43 por ciento aceptó reconoció hacerlo golpeado a su hijo con una correa o un chicote, Los motivos por los cuales que se usó la violencia fueron por desobediencia, falta de apoyo en las tareas de la casa y mal comportamiento.

Por su parte, los niños identificaron al maltrato con la violencia física, pero no con la violencia psicológica. Los niños señalaron que el uso del chicote y la correa, golpes con la mano o un palo, y los jalones de pelo y orejas, son los castigos físicos más utilizados contra ellos, tanto por sus padres como por sus profesores.

Según este informe del IEP, otro aspecto que ocasiona un impacto negativo en los niños es la violencia de pareja. El 29 por ciento de cuidadoras señaló estar de acuerdo en que su pareja le grite si descuida a los niños y el 10 por ciento en que lo haga si se niega a tener relaciones sexuales. De acuerdo a este estudio, “el maltrato hacia la mujer se extiende a sus hijos e hijas, afectando seriamente su bienestar y su desarrollo, con secuelas a largo plazo”.

Este estudio resaltó que la violencia contra los niños “es una práctica intergeneracional, ya que 9 de cada 10 madres la vivieron cuando eran niñas, motivo por el cual los padres no comprenden por qué esta práctica se debe sancionar”.
El estudio también indica que “las autoridades encargadas de impartir justicia también vivieron este tipo de violencia siendo niños” lo que favorece la tolerancia hacia la violencia contra la infancia.    

De acuerdo a este estudio, un aspecto que protege a los niños de la violencia es el uso adecuado de los espacios del hogar. Los resultados de la investigación evidenciaron que un alto porcentaje de los adultos en el hogar dormían en la misma cama de los niños, lo que supone una potencial situación de riesgo.