“Hay que superar la inseguridad alimentaria de las poblaciones altoandinas, amazónicas y urbano marginales”

Entrevista: Maycoll Falconi

Óscar Liendo, médico pediatra especialista en políticas públicas y miembro del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia, habla sobre las principales acciones que debe llevar adelante el nuevo gobierno para mejorar la atención de la salud de los niños y terminar con problemas como la anemia y la desnutrición infantil. Destaca la importancia de asegurarles a las familias el acceso a alimentos adecuados y hacer un seguimiento al desarrollo de los niños.

Este nuevo gobierno comparte la preocupación del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia por la eliminación de la anemia infantil, y también otras metas vinculadas a los niños, como la reducción de la desnutrición crónica y la mortalidad infantil. En esto estamos claros y compartimos estas metas. Ahora más allá de las metas la tarea es pasar a la acción…

Son varias las acciones que el nuevo gobierno debe llevar a cabo. Estas acciones necesitan un trabajo articulado entre todos los sectores, principalmente los que tengan relación directa con los temas relaciones a la infancia, como Salud, Desarrollo e Inclusión Social y Agricultura. Una primera acción debe ser mejorar la atención materno-infantil integral en establecimientos de salud del Ministerio de Salud (MINSA), en las comunidades y en los hogares, que es algo fundamental. Esto coincide con la decisión de la ministra de Salud, Patricia García, que ha anunciado este tema como prioritario en los primeros cien días de este nuevo gobierno. Hay que tener en cuenta que las madres tienen que ir a los centros de salud a las 5 de la mañana para que sean atendidas a las 11 de la mañana. En ese sentido, se tiene que ampliar la atención materno-infantil a 12 horas diarias en centros de salud y postas sanitarias, también se debe buscar reducir la alta rotación del personal de salud en establecimientos rurales del MINSA. Finalmente, se tienen que crear redes municipales de educadoras que visiten los hogares para que capaciten a las madres en la mejor atención y cuidado de sus hijos y hagan seguimiento a la salud de los niños.

Sí, pero concentrado en el aspecto de salud de los niños. Hay que tener en cuenta que a un niño que es detectado con anemia no solamente se le debe dar los micronutrientes, sino también hay que hacer visitas a su familia para hacer un seguimiento a la salud del niño. Eso no se está dando ahora. Este tipo de modalidad de atención tiene que ser ligada a la lucha contra la anemia y la desnutrición. Esto debería estar basado y liderado por el trabajo que en ese sentido deben hacer las municipalidades.

Hay que superar la inseguridad alimentaria de las poblaciones altoandinas, amazónicas y urbano marginales. No se le puede pedir a una madre amazónica que solo come yuca que le prepare una dieta especial a su hijo más pequeño. No hay forma. Para esto se debe incrementar el acceso de la población altoandina y amazónica a una alimentación integral para los niños menores de tres años, y crear un paquete integral de alimentación para la población infantil menor de tres años en riesgo nutricional. Para esto se debe apostar por el consumo de productos regionales que combatan tanto la anemia como la desnutrición infantil. Esto sigue faltando y es una de las grandes omisiones del gobierno de Ollanta Humala. Esta es mi bandera desde hace mucho tiempo.

Ahora que se está hablando del relanzamiento de la agricultura y de la agricultura familiar, este trabajo de promover la alimentación con productos locales de los niños menores de tres años es fundamental. Una vez identificado el niño en riesgo hay que darle alimento fortificado. Esto es urgente, y es algo que está faltando.

Hasta ahora no tenemos una estrategia nutricional para recuperar a los niños desnutridos. Las cifras son desconsoladoras: menos del 10 por ciento de los niños que son detectados con desnutrición crónica se recuperan. Es como si casi quedaran condenados estos niños. Esto debe ser parte de la atención domiciliaria: darle acceso a las familias a alimentos adecuados y brindarle atención y seguimiento al recién nacido con bajo peso. Otra acción urgente es mejorar la desvinculación que actualmente existe en los diferentes sistemas de información sobre la infancia. Toda la información acerca de los niños debe estar integrada. Integrar la información que existe es la mejor articulación.

¿La falta de acceso a los servicios de agua y saneamiento es fundamental en la salud de los niños?

Darle a toda la población acceso a esos servicios es la quinta acción urgente. Hay que mejorar la falta de asistencia técnica para las municipalidades rurales en agua, saneamiento y medio ambiente. El gobierno ha dicho que va a universalizar el acceso a agua y saneamiento y está bien, pero en el país no existen los técnicos en agua, saneamiento y medio ambiente suficientes para alcanzar esto. Antes teníamos una red de este tipo de técnicos y ya es hora de volver a tenerla. Esto sería coherente con la promesa del nuevo gobierno.

Todo depende del énfasis que se le dé a esta lucha. Si se mejora la acción contra la anemia, la entrega de alimentos fortificados, si se tiene un buen sistema de recuperación, si se tiene buena información, esta meta de terminar con la anemia infantil se va a lograr más rápido. Todo esto va a depender de la inversión que se haga para esto.

Me parece bien que ese cargo lo ocupe una persona con experiencia en salud pública, como es la doctora Patricia García. Me parece mejor que ese cargo lo ocupe alguien como ella  y no un médico especialista en riñones o un oftalmólogo. Ella viene del sector académico y de investigación. Es importante la incidencia de la sociedad civil en las políticas de Estado. Las políticas en todos los niveles contra la anemia y la desnutrición deberían tener el aporte significativo de la sociedad civil. No puede ser algo cerrado. Espero que la ministra de Salud y su equipo de la Universidad Cayetano Heredia escuchen al resto.