Un niño, un ciudadano

El programa "Derecho al Nombre" busca asegurar que los niños y niñas nacidos en el Hospital San Juan de Lurigancho tengan una identidad legal y así puedan acceder a sus derechos sin dificultad.

En el Hospital San Juan de Lurigancho, Rosa Isabel Medina, 31 años, acaba de ser madre de una saludable niña. Pese a que Rosa ya le ha escogido el nombre, su pequeña hija aún sigue siendo invisible, es decir, no existe legalmente y, por lo tanto, hasta que no sea inscrita en el Registro Civil su niña no podrá acceder a derechos fundamentales como al Seguro Integral de Salud (SIS) o a una educación gratuita.

“Es lamentable que pese a que hay una oficina de la RENIEC (Registro Nacional de Identificación y Estado Civil) en los hospitales,  los niños recién nacidos salgan sin partida de nacimiento”, sostiene Manuel Vargas, coordinador del programa Derecho al Nombre de la Asociación Taller de los Niños, organización que busca asegurar que los niños y niñas nacidos en el Hospital San Juan de Lurigancho tengan una identidad legal y así  puedan acceder a sus derechos sin dificultades.

“Los principales factores para que los niños no fueran registrados se debía a la poca información de los padres”, agrega Vargas.

Ante esta situación, el programa Derecho al Nombre definió la necesidad de que una promotora  oriente a las madres y familiares sobre la importancia de que los recién nacidos tengan una partida de nacimiento y los requisitos que necesitan para obtenerla.

Otro de los puntos de intervención de este programa es en la revisión de los Certificados de Nacidos Vivos (CNV). La promotora revisa los  datos de la madre y el recién nacido evitando así que se cometan errores y la madre no pueda registrar a su hijo en la oficina de la RENIEC. Para ello, también realizan charlas de sensibilización a las obstetras sobre la importancia del registro del menor y  el cuidado que se debe tener durante la emisión de los CNV.

Una vez que la promotora verifica que los datos registrados en el CNV son correctos, acompaña a la madre, junto a su bebé y el padre del menor, a la oficina del RENIEC asegurando que el menor sea registrado y cuente con una partida de nacimiento.

“La distancia entre la oficina de RENIEC y la sala de hospitalización es casi de 50 metros, por ello tenemos que sacar a las madres en sillas de ruedas, y en muchos casos las madres han tenido partos con cesarea, y ahí tenemos que llevarlas con  mucho cuidado. Estamos trabajando para que se logre tener una oficina más cerca”, explica Vargas.

“Al inicio del programa solo se registraban 100 niños de 400 partos, pero ahora se registran 450 menores de 500 partos mensuales”, indica Manuel Vargas.

Para el mes de mayo, el programa Derecho al Nombre también se desarrollará en el Instituto Nacional Materno Perinatal (ex Maternidad de Lima).

Datos:
Cada año en el distrito de San Juan de Lurigancho nacen más de 20 mil niños, de los cuales un poco más de 5 mil niños nacen en el hospital San Juan de Lurigancho, el único hospital  en todo el distrito.