La infancia en las elecciones*

Por: Grupo Impulsor Inversión en la Infancia**

Los niños no votan, pero las elecciones son un buen momento para poner en la agenda nacional un tema tan trascendente como el de la primera infancia de nuestro país. El Grupo Impulsor Inversión en la Infancia lanza esta Alerta Ciudadana para mostrar la situación de los niños peruanos, señalar las acciones urgentes que se deben tomar para asegurarles un desarrollo pleno, incidir en los candidatos a la presidencia y sus propuestas para la primera infancia y someter ante la opinión pública los compromisos que esperamos asuma el próximo gobierno.

Todos los niños desarrollan plenamente todas sus capacidades desde la primera infancia. Este debe ser nuestro objetivo como país, que el próximo gobierno debe asumir. Para ello, las políticas dirigidas a la primera infancia tienen que ser políticas de Estado, que trasciendan a los gobiernos y nos comprometan a todos. Sobre los temas de la infancia no debe haber rivalidades políticas, deben primar las coincidencias. 

Que todos los niños tengan las mismas oportunidades de desarrollo es una buena inversión para el país, pero, sobre todo, es un derecho fundamental que el Estado tiene la obligación de asegurar. En el Perú, los niños que viven en pobreza no tienen ese derecho. El Estado y la sociedad deben actuar para cambiar esta situación.

Para lograr este objetivo se deben priorizar políticas para terminar con la desnutrición y la anemia infantil que limitan el desarrollo del niño, asegurar una educación de calidad para todos desde el nivel inicial y acabar con la violencia y el abandono que afectan a una buena parte de nuestra infancia. 

En el país, debido a la pobreza, hay más de un millón de niños menores de 5 años con anemia y más de 400 mil con desnutrición crónica, quienes, por esta razón, ven seriamente afectado el desarrollo de sus capacidades desde el inicio de sus vidas y no tendrán las mismas oportunidades. El Grupo Impulsor Inversión en la Infancia propone como meta nacional “Anemia y Desnutrición Cero al año 2021”. Diversos expertos coinciden en señalar que esta meta es posible de ser alcanzada y que el país tiene la experiencia y los recursos humanos, técnicos y financieros para lograrla. 

Una buena educación y cuidado de la primera infancia es la base para el desarrollo pleno de las personas a lo largo de su vida. En nuestro país tenemos un gran déficit de atención en la educación y cuidado para los niños menores de 3 años. Esta atención apenas bordea el 5 por ciento a nivel nacional. Se debe apoyar a las familias para un buen cuidado y desarrollo integral de los niños de esa edad.

En el caso de los niños entre 3 y 5 años, la cobertura en educación inicial es de 81 por ciento, pero hay un importante déficit en la calidad de la misma. Una reciente evaluación nacional presentada por el Ministerio de Educación revela que uno de cada tres niños que asiste a educación inicial no alcanza el nivel esperado de desarrollo infantil temprano. Las brechas entre la atención rural y urbana continúan. Según datos oficiales, hacen falta unos 27 mil maestros debidamente preparados para enseñar en este nivel y los centros de formación docente no los están preparando. Hay otro problema en gestación: el crecimiento de la educación privada desregulada y de mala calidad. Atender todos estos problemas se hace urgente. 

La violencia contra los niños es inaceptable y no se puede tolerar. Pero somos una sociedad muy permisiva con esta violencia: un tercio de la población utiliza el castigo físico como medida de corrección, ocultando la violencia en hábitos de crianza. Hay que visibilizar la magnitud de este grave problema y sus consecuencias negativas para el desarrollo infantil. Es necesario que el país cuente con mayor información sobre la violencia, física y sicológica, contra la infancia. Se deben asignar recursos y poner en marcha políticas públicas para prevenir y erradicar la violencia contra los niños en todos los ámbitos: familia, escuela y comunidad, y para atender a los niños que son víctimas de esta violencia. Hay que sensibilizar a la población sobre los efectos negativos de la violencia hacia los niños y ofrecerles pautas de disciplina positiva.   

Asegurar la asignación de recursos necesarios hasta el año 2021 y su descentralización efectiva es fundamental para mejorar tanto la calidad de la inversión, como la atención de la primera infancia. Las autoridades municipales tienen un rol central en la implementación de las políticas de atención a los niños, porque son las más cercanas a la población y tienen la información de cuántos niños hay en su localidad y los problemas que enfrentan y, por lo tanto, qué acciones y presupuesto se requieren para atender sus necesidades. Se debe garantizar la provisión de recursos económicos y el desarrollo de las capacidades de las autoridades nacionales, regionales y locales, para que puedan cumplir con eficiencia sus funciones.

La falta de una articulación efectiva de las distintas acciones que desarrollan los diferentes sectores y niveles de Gobierno son un obstáculo permanente para mejorar la eficiencia de la atención a los niños. Se requiere contar con una instancia de decisión que actúe desde el más alto nivel del Estado y que, sin recargar más burocracia, se encargue de articular la planificación y ejecución de las distintas acciones de las diferentes instancias de Gobierno que atienden el conjunto de necesidades de los niños. La sociedad civil debe tener una participación activa en la definición de las políticas públicas para la primera infancia y en su seguimiento. 

El Grupo Impulsor Inversión en la Infancia considera que el actual contexto electoral es clave para que todos los actores políticos, entre ellos las autoridades del nuevo gobierno electo, asuman un compromiso claro y concreto para cumplir con estas propuestas para llegar al 2021, año del Bicentenario de la Independencia Nacional, con las metas cumplidas a favor de la primera infancia. 

* Declaración presentada por el Grupo Impulsor Inversión en la Infancia en la V Alerta Ciudadana por la Primera Infancia.

** El Grupo Impulsor Inversión en la Infancia es una iniciativa ciudadana nacional, conformada el año 2008, orientada a crear conciencia en instituciones públicas y privadas, así como en el conjunto de la ciudadanía, respecto a la necesidad de invertir en la primera infancia como factor clave para la erradicación de la pobreza y para asegurar un desarrollo sostenible del país.