"Debemos entender que la educación no solo se da en las aulas y en las escuelas”

El presidente del Consejo Nacional de Educación, César Guadalupe, resaltó  el importante rol de la educación para formar a las personas para alcanzar una mejor sociedad. 

“Las cosas que nos pasan como país son resultados de nuestras propias acciones. Por eso, como sociedad debemos entender el destacado rol de la educación, que no solamente se da en las aulas y en las escuelas, sino también en el entorno donde se desarrollan los niños y niñas”, sostuvo Guadalupe.

En ese sentido, César Guadalupe destacó también que la tarea de la educación no es solo transmitir contenidos. “Educar es formar y desarrollar personas en una sociedad democrática y esto pasa por la afirmación de la identidad personal, como parte de una colectividad basada en principios de libertad y responsabilidad”.

Sobre el papel de la educación en el contexto de corrupción y violencia por el que atraviesa el país, Guadalupe señaló que como país tenemos que analizar el futuro que queremos. “La ciudadanía y la construcción de una sociedad democrática tiene dos planos: una primera sobre la afirmación de nosotros como una colectividad nacional y una segunda que tiene que ver con las relaciones entre nosotros, basadas en el respeto, en la dignidad de las personas, el imperio de la ley”, dijo.

“Esperamos que estos tres años del gobierno de Vizcarra sean un espacio para analizar lo que se ha venido haciendo como país y adonde queremos ir, como el Pacto por la Infancia y el Proyecto Educativo Nacional. El Consejo Nacional de Educación está haciendo una evaluación del Proyecto Educativo Nacional para formular uno nuevo. Estamos esperando que se den las elecciones regionales y locales para todo el año 2019 lancemos un proceso de consulta a nivel nacional para ver hacia donde tenemos que encaminar la educación en los próximos 15 años. Las soluciones no se pueden improvisar, tenemos que conversarlas y dialogarlas”.

Además, sostuvo que la solución a los problemas de corrupción, se encuentra en la formación de los ciudadanos como personas libres y, por lo tanto, responsables de sus actos. “Si no desarrollamos esa capacidad reflexiva de reconocer hasta donde alcanzan mis acciones y mis omisiones y como eso tiene consecuencias sobre los demás, estamos en problemas”.