“La pobreza en menores de 14 años duplica el índice nacional”

El antropólogo y miembro del Grupo Impulsor Inversión por la Infancia, Carlos E. Aramburú,  analiza el incremento a nivel nacional de la pobreza y, principalmente, la concentración de esta problemática en la infancia y adolescencia.

De acuerdo a la Encuesta Nacional de Hogares del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la tasa de pobreza en el país pasó de 20,7 por ciento en el 2016 a 21,7 por ciento de la población en el año 2017. Y según un estudio realizado por Fondo de las Unidas para la Infancia (Unicef) Perú, 1 de cada 3 niños y adolescentes (30,2 por ciento) vive en esta condición.

“Cuando se analiza por qué los niños son los más pobres en el Perú la explicación es muy sencilla: las familias más pobres tienen más hijos. La tasa de pobreza en personas menores de 14 años es de 40 por ciento, es decir este porcentaje duplica la tasa nacional de pobreza. Por eso si bien la anemia es nuestra prioridad, es prioridad del gobierno y me parece muy bien, hay que complementarla con otras intervenciones entre ellas planificación familiar que es un programa que no ha tenido la prioridad debida los últimos años”, advirtió el Carlos E. Aramburú.

El antropólogo también cuestionó que aún en nuestro país se mida la pobreza solamente con el factor económico.  “La pobreza conjuga múltiples factores como: aspectos sociales, familiar, educación, entre otros. El Perú es uno de los países que no tiene la medición multidimensional de la pobreza, existe un impacto social, emocional y físico más agravado en niños que en adultos. Además, una de las consecuencias del incremento de pobreza en nuestro país es la anemia y desnutrición infantil”.

Sobre la meta de reducir la anemia infantil en niños menores de 3 años del 43 por ciento actual a 19 por ciento al 2021, anunciadas por el primer ministro César Villanueva, el antropólogo señaló que para lograrlo se necesita un trabajo de todos los sectores de la sociedad. 

“Es claro que entre las metas emblemáticas de este gobierno se encuentra la reducción de la anemia, en el que se ha colocado una meta muy ambiciosa, grande e importante que es bajarla a más de la mitad.  Lograr esta meta es un compromiso en el que todos debemos involucrarnos, porque alcanzar implica el trabajo del gobierno, de las familias, de la empresa y de la sociedad civil”, manifestó Aramburú.