La sociedad civil por una Agenda de Gobernabilidad por los niños y niñas

La iniciativa ciudadana Inversión en la Infancia ha demandado la necesidad urgente de la construcción de una Agenda de Gobernabilidad por los niños y niñas. Para ello ha puesto a disposición las conclusiones del V Encuentro Nacional, el Pacto Social, acciones a emprender por autoridades locales y experiencias exitosas por la infancia.

Esta labor realizada a lo largo del 2019 se continuará en el 2020. Para ello se profundizará el rol de la sociedad civil en cuanto a la vigilancia y seguimiento de las metas y compromisos asumidos, como también del uso eficiente de los recursos asignados.

El 2019 no ha sido un buen año para la gestión pública en la infancia no sólo por los a avances de ejecución presupuestal sino también en la calidad e impacto de los recursos utilizados. En el caso de los programas presupuestales todavía no se alcanza ni se alcanzarían las metas establecidas por el gobierno al 2021 de llegar al 19% en anemia y 6% en Desnutrición Crónica Infantil, lo que da un saldo negativo de lo avanzado.

La agenda de gobernabilidad pone de relieve el rol que cumplen las municipalidades y sus autoridades. Por coincidencia el gobierno ha planteado capacitar al personal de las municipalidades y gobiernos locales, lo cual coincidimos, pero también es importante fortalecer a los gobiernos locales pues las municipalidades pequeñas y rurales a veces no cuentan con personal suficiente o rotan constantemente por la situación de premuras presupuestales para realizar bien sus funciones. Esto se debe de solucionar.

Por otro lado, en la agenda se debe considerar tener una autoridad responsable con la capacidad de articular no sólo a los sectores involucrados con la infancia también con las instancias descentralizadas. Para ello debe tener capacidad política y de gestión pública que le permita alcanzar las metas o avanzar de manera sustancial en enfrentar los problemas. La infancia no espera y crece día a día.       

 

Esta Agenda de Gobernabilidad por los niños y niñas debe estar enmarcada, a corto y mediano plazo, en una política integral de Estado que atienda a la infancia al año 2030, de acuerdo a lo establecido en los Objetivos de Desarrollo Sostenible.