INEI confirma crecimiento de anemia y mortalidad infantil

La última Encuesta Demográfica y de Salud Familiar ENDES – 2013, del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), confirma el aumento de la anemia y la mortalidad infantil por segundo año consecutivo en 2013, así como la desaceleración en la ritmo de reducción de la desnutrición crónica infantil. También sube la mortalidad neonatal. Datos preocupantes sobre la situación de la primera infancia.  Los resultados de la ENDES 2013 fueron presentados el miércoles 21 de mayo.

El año 2013, la anemia infantil en niños menores de 5 años se incrementó, como promedio nacional, 1,1 puntos porcentuales, pasando de 32,9 por ciento en 2012 a 34 por ciento en 2013. El año 2012 había subido 2,2 puntos. Esta alza de la anemia infantil por segundo año consecutivo, que significa un incremento de 3,3 puntos en dos años, se da luego de una importante reducción en los años anteriores. 

La anemia infantil a nivel urbano es 31,1 por ciento, mientras en las zonas rurales llega a 39,8 por ciento. La brecha entre las zonas urbanas y rurales ha venido disminuyendo. El último año la anemia infantil a nivel rural bajó 0,9 puntos (de 40,7 por ciento en 2012 a 39,8 por ciento en 2013), mientras en las zonas urbanas se elevó 2,5 puntos (de 28,6 por ciento en 2012 a 31,1 por ciento en 2013).

En 14 de las 24 regiones del país la anemia entre los niños menores de 5 años se incrementó. Junín es la región con el mayor aumento, con un alza de 11,8 puntos porcentuales, pasando de 31,3 por ciento en 2012 a 43,1 por ciento en 2013. Las otras regiones con mayor incremento de anemia infantil son: Madre de Dios, con un aumento de 8,3 puntos, de 39,9 a 48,2 por ciento; y Cusco, con un alza de 7,9 puntos, de 38,8 a 46,7 por ciento.

Puno es la región con mayor índice de anemia infantil, con 65,8 por ciento (en 2012 fue 61,5 por ciento); seguida por Pasco, con 49 por ciento (en 2012 fue 43,4 por ciento); Madre de Dios, con 48,2 por ciento (en 2012 fue de 39,9 por ciento); Loreto, con 47,8 por ciento (en 2012 fue 49,5 por ciento); y Cusco, con 46,7 por ciento (en 2012 fue 38,8 por ciento).

Los menores índices de anemia infantil se presentan en las regiones San Martín, con 22,4 por ciento (en 2012 era 24 por ciento); Moquegua, con 23,9 por ciento (en 2012 fue 26,4 por ciento); Lambayeque, con 25,3 por ciento (en 2012 fue 24,1 por ciento); y el departamento de Lima y la Provincia Constitucional del Callao, con 26,4 por ciento (en 2012 fue 24,3 por ciento). 

La Libertad es la región que en el año 2013 tuvo el mayor descenso de la anemia infantil, bajando 5,8 puntos, de 36,7 a 30,9 por ciento.

Según la ENDES 2013, la mortalidad infantil (niños menores de un año) aumentó, como promedio nacional, de 17 por cada 1,000 nacidos vivos en 2012 a 19 por 1,000 en 2013. El año 2012 había subido de 16 por 1,000 a 17 por cada 1,000 nacidos vivos.

La tasa de mortalidad infantil en el área urbana es 16 por cada 1,000 nacidos vivos, mientras a nivel rural es 24 por 1,000 nacidos vivos. En ambos casos la mortalidad se ha elevado en el año 2013 (en la zona urbana de 14 a 16 por 1,000 y en la rural de 22 a 24 por 1,000).

La mortalidad neonatal (niños hasta un mes de vida) también subió en 2013, al pasar de 9 por 1,000 nacidos vivos en 2012 a 12 por 1,000 en el año 2013. A nivel urbano la mortalidad neonatal es 11 por cada 1,000 nacidos vivos y en el área rural es 14 por 1,000. En ambos casos se incrementó el último año (de 8 a 11 por 1,000 a nivel urbano y de 11 a 14 por 1,000 en el área rural).

En el año 2013, la desnutrición crónica infantil disminuyó a nivel nacional, pero a un ritmo menor que en los años anteriores, y subió en seis regiones del país. El último año bajó, a nivel nacional, solamente 0,6 puntos porcentuales, de 18,1 por ciento en 2012 a 17,5 por ciento en 2013. El año anterior ya se había dado una desaceleración en su reducción, al disminuir 1,4 puntos, nivel significativamente menor al del 2011, año en el que había bajado 3,7 puntos, de 23,2 por ciento en 2010 a 19,5 por ciento en 2011.  

Mientras la desnutrición crónica infantil a nivel urbano es 10,3 por ciento, a nivel rural se eleva hasta 32,3 por ciento. En el último año se ha incrementado la desnutrición crónica infantil rural, que en 2012 era 31,9 por ciento, mientras que la urbana, que en 2012 había sido 10,5 por ciento, descendió ligeramente.  

Los mayores índices de desnutrición crónica entre los niños menores de 5 años se registran en las regiones de Huancavelica, con 42,4 por ciento (aunque esta región es la que tuvo el mayor descenso en 2013, al bajar casi 8 puntos, de 50,2 a 42,4 por ciento); Cajamarca, con 35,6 por ciento (subió respecto a 2012, año en el que había sido 34,2 por ciento); Apurímac y Huánuco, ambas con 29 por ciento (en 2012 fue 32,2 por ciento en Apurímac y 30,9 por ciento en Huánuco); y Ayacucho, con 28 por ciento (en 2012 fue 29,5 por ciento).

Los menores niveles de desnutrición crónica infantil se dan en Tacna, con 2,9 por ciento (en 2012 fue 3,1 por ciento); Moquegua, con 4,1 por ciento (en 2012 fue 4,4 por ciento); el departamento de Lima y la provincia constitucional del Callao, con 5,1 por ciento (6,3 por ciento en 2012); Ica, con 7,7 por ciento (igual porcentaje en 2012); y Arequipa, con 8,7 por ciento (7,3 por ciento en 2012). 

Las seis regiones del país en las que se incrementó la desnutrición crónica infantil en el año 2013 son: Piura, con un aumento de 3,2 puntos (de 21,7 por ciento en 2012 a 24,9 por ciento en 2013); Cajamarca y Arequipa, con un alza de 1,4 puntos (de 34,2 a 35,6 por ciento en el caso de Cajamarca, y de 7,3 a 8,7 por ciento en Arequipa); La Libertad, con un incremento de 1,1 puntos (de 21 a 22,1 por ciento); Pasco, donde subió 0,5 puntos (de 26 a 26,5 por ciento); y Lambayeque, con un aumento de 0,2 puntos (de 14 a 14,2 por ciento).