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Mortalidad por el frío, desnutrición, anemia, servicios básicosLa primera infancia en Puno y CarabayaEn la provincia de Carabaya, ubicada en Puno, a 4,500 metros de altura, viven alrededor de 75 mil personas y más de 10 mil niños menores de cinco años. Las dos terceras partes de su población es rural, dedicada mayoritariamente al pastoreo de alpacas. En los últimos tres años, en esta provincia altoandina, donde en las noches la temperatura desciende hasta cerca de 20 grados bajo cero, han muerto más de 50 niños menores de cinco años a causa del frío. En lo que va de este año, hasta el 15 de junio -las últimas cifras oficiales disponibles - han muerto en la región Puno, según la Dirección General de Epidemiología, 22 niños menores de cinco años por razón del frío. En el año 2012 en este período habían muerto en esta región 24 niños, y en todo el año 2012 fallecieron en Puno 59 niños de esta edad por el frío. A nivel nacional, hasta el 15 junio de este año han fallecido 195 niños menores de cinco años por causa del frío. El año 2012 habían muerto, en este mismo período, 166 niños, lo que significa que las muertes de niños por el frío se han incrementado a nivel nacional durante este año. Durante todo el año 2012, el frío causó en el país la muerte de 374 niños menores de cinco años. Desnutrición y anemia La desnutrición crónica y la anemia infantil contribuyen a incrementar la mortalidad por causa de las bajas temperaturas. Puno es la región del país con el mayor índice de anemia infantil: según datos oficiales del año 2012, el 61,5 por ciento de los niños entre seis meses y cinco años de edad que viven en Puno, es decir dos de cada tres niños, sufren de anemia. A nivel nacional, el índice de anemia infantil es de 32,9 por ciento. Agua y saneamiento En cuanto al acceso a servicios básicos, en la región Puno el 44,4 por ciento de la población no tiene agua potable, y un 21,6 por ciento no accede a ningún tipo de servicio de saneamiento, incluyendo letrinas. Según datos oficiales, del 78,4 por ciento que tiene acceso a servicio de saneamiento, un 48,5 por ciento utiliza una letrina, el 24,1 por ciento tiene servicio de desagüe dentro de su vivienda y un 5,4 por ciento accede a una red pública fuera de su vivienda. A nivel nacional, el 21,1 por ciento de la población carece de agua potable y 11,4 por ciento no tiene acceso a ningún tipo de servicio de saneamiento. Solucionar estos problemas y carencias es posible. El país tiene los conocimientos técnicos y los recursos económicos para cambiar esta realidad que afecta el desarrollo de los niños y niñas. Las “Casas Calientes” no son la solución absoluta para todos los problemas que afectan a la primera infancia de esta zona del país, pero son una propuesta solidaria, y un importante paso, para hacer frente a las muertes de niños y niñas a causa del frío, tragedia que se repite todos los años. |