“Qali Warma tiene como eje central la buena alimentación de los niños”

La coordinadora del programa Qali Warma, Guiselle Romero, en entrevista con el programa Opinión de Salgalú TV Online (www.salgalu.tv), señaló que “el principal objetivo de este nuevo programa de alimentación escolar es brindar alimentos ricos, variados y nutritivos a los niños beneficiarios, poniendo en el primer lugar, en el centro de todo este programa, la buena alimentación de los niños”.

Romero aseguró que el nuevo programa Qali Warma, que reemplaza desde este año al desactivado Programa Nacional de Asistencia Alimentaria (PRONAA) en la alimentación a los niños de 3 a 12 años, “garantizará este año la  atención alimentaria escolar a 2 millones 700 mil niños y niñas en alrededor de 47 mil escuelas públicas de educación inicial y primaria en todo el país. Para el año 2016 Qali Warma deberá estar atendiendo a todas las escuelas públicas de inicial y primaria en todo el territorio nacional”. La meta para el 2016 de este programa es brindar asistencia alimentaria a aproximadamente 3 millones 800 mil niños entre 3 y 12 años.

En opinión de la coordinadora del programa Qali Warma, la alimentación brindada en las escuelas tiene una estrecha relación con el rendimiento escolar de los niños.

“Hemos encontrado una relación de causalidad entre la entrega de los alimentos y la mejora de atención educativa por parte de los alumnos, especialmente en primaria y secundaria. Pero esto tiene que ir acompañado por un buen profesor y una buena infraestructura, todo esto en conjunto nos llevará a mejorar las condiciones de aprendizaje de los niños y niñas”, señaló Guiselle Romero.

De acuerdo al Infobarómetro de la Primera infancia, en el Perú el 19,5 por ciento de los niños menores de cinco años, es decir más de 630 mil, sufren de desnutrición crónica. En la zona urbana la desnutrición crónica infantil es de 10,1 por ciento, mientras en la zona rural llega al 37 por ciento, aunque en diversos distritos rurales la desnutrición es significativamente mayor a ese promedio. Es el caso del distrito de Omacha, en Cusco, donde la desnutrición crónica infantil llega a más del 80 por ciento.

Ante esta situación, Guiselle Romero resaltó que “en los distritos más pobres de nuestro país, sobre todo rurales, estamos incrementando las dosis de calorías para los niños y niñas. Esta dosis puede llegar a alcanzar más del 60 por ciento de energía para los niños. Además, estamos implementando un sistema de dietas para que la población pueda consumir vegetales, frutas, entre otros productos con alto contenido calórico”.

Sobre denuncias de pequeños productores locales

Uno de los objetivos complementarios de este nuevo programa, Qali Warma, según la ministra de Desarrollo e Inclusión Social, Carolina Trivelli, es “incorporar y apoyar a los pequeños productores locales como proveedores de la alimentación escolar”.

Sin embargo, 80 mil pequeños productores de leche, que hasta el año pasado vendían su producción al PRONAA, han denunciado que, a pesar de ese objetivo declarado de apoyar a los pequeños productores locales, ellos no han sido tomados en cuenta por este nuevo programa como proveedores de leche fresca, ya que se ha optado por comprar leche evaporada en lata a la industria lechera. Esto, señalan los pequeños ganaderos, les originará, en el primer semestre de este año, una pérdida de 56 millones de soles.

Frente a esta denuncia, la coordinadora de Qali Warma, Guiselle Romero, respondió en el programa Opinión que “el diseño de este programa está orientado para alentar la participación y apoyar a los pequeños productores locales y hemos dividido el país en ocho regiones alimentarias para ayudarlos, pero  ellos querían seguir brindando sus mismos productos como lo han venido haciendo, sin tener en cuenta si estos productos eran aceptados o no por lo niños”.

“Nosotros necesitamos garantizar que los productos lleguen en buenas condiciones para que su consumo no genere problemas a los niños. Y existen reportes que la leche fresca de estos productores había generado problemas con los niños. Por eso queremos que haya una buena cadena de inocuidad, que exista una cadena de frío, que hayan los procesos adecuados para que no exista adulteración del producto, y mientras eso no se garantice lamentablemente no podemos optar por esos productos”, dijo Romero, justificando la decisión de comprar leche evaporada en lata a la industria lechera y no leche fresca a los pequeños ganaderos.

La coordinadora de Qali Warma reveló que se están trabajando programas pilotos para identificar los procesos que deben seguir los pequeños productores de leche fresca pasteurizada y de otros productos. “Además estamos articulando esfuerzos, desde el año pasado, con el Ministerio de Agricultura, el Ministerio de la Producción, los gobiernos regionales, Gerencias Regionales de Desarrollo Económico, para realizar una estrategia de asistencia técnica para que lo pequeños productores locales estén mejor preparados y puedan ser parte y participar en este programa”, aseguró Guiselle Romero.