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Meta es reducir para el 2016 la desnutrición infantil a menos del 10 por ciento

Gobierno adopta Compromiso Nacional para la Lucha Articulada contra la Desnutrición Infantil

Primer ministro, Juan Jiménez, anunció el 14 de agosto el "Compromiso Nacional para la Lucha Articulada contra la Desnutrición Infantil".
El gobierno anunció que se pondrá en marcha una estrategia articulada para disminuir la desnutrición crónica infantil. El anuncio lo hizo, el 14 de agosto, el primer ministro, Juan Jiménez, quien informó que once ministerios han suscrito un “Compromiso Nacional para la Lucha Articulada contra la Desnutrición Infantil”, con el objetivo de reducir la desnutrición crónica infantil para el 2016 a menos del 10 por ciento a nivel nacional. De acuerdo al Infobarómetro de la Primera Infancia, la desnutrición crónica infantil afecta al 19,5 por ciento de los niños menores de cinco años del país, lo que significa que 633,411 niños están afectados por este grave problema.

Además del primer ministro, este compromiso también ha sido suscrito por otros diez ministros: Luis Miguel Castilla, de Economía y Finanzas; Carolina Trivelli, de Desarrollo e Inclusión Social; Patricia Salas, de Educación; Midori de Habich, de Salud; Ana Jara, de la Mujer y Poblaciones Vulnerables; René Cornejo, de Vivienda y Construcción, Miguel Arias, de Agricultura; Gladys Triveño, de Producción; José Villena, Trabajo; y Eda Rivas, de Justicia.

El presidente del Consejo de Ministros manifestó que este compromiso garantiza un presupuesto sostenible por parte de cada ministerio para reducir la desnutrición crónica infantil a pesar de presentarse eventuales crisis económicas o políticas.

“Estamos demostrando que el camino para terminar con esta problemática (la desnutrición crónica infantil) es el trabajo entre los distintos sectores del gobierno. Pese a que en los últimos 15 años se ha reducido la pobreza cerca de 28 por ciento, la desnutrición crónica infantil ha disminuido sólo en 6,3 por ciento”, señaló Juan Jiménez.

Este compromiso ha sido adoptado poco después del diálogo abierto “Inversión Social y Primera Infancia” organizado por el Grupo Impulsor Inversión en la Infancia el pasado 17 de julio, en el que participaron los ministros de Economía y Finanzas, Educación y Desarrollo e Inclusión, presidentes regionales, alcaldes y representantes de la sociedad civil, en el que hubo consenso en señalar que a pesar del desarrollo económico hay un déficit en desarrollo social y que el principal reto de la gestión pública para mejorar los resultados en las políticas a favor de la primera infancia, como la reducción de la desnutrición crónica infantil, es lograr una articulación eficiente tanto entre los distintos ministerios y programas sociales como entre el gobierno nacional, los gobiernos regionales y locales.

En 1,445 distritos

El “Compromiso Nacional para la Lucha Articulada contra la Desnutrición Infantil” se implementa en el marco de la norma que dictó el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social el pasado 23 de julio para mejorar la articulación entre los distintos niveles del Estado y programas sociales y adoptar intervenciones multisectoriales para reducir la desnutrición crónica infantil.

Este acuerdo de articulación se aplicará en 1,445 distritos de todo el país. Estos distritos han sido seleccionados por tener los mayores índices de desnutrición crónica infantil, más de mil niños con desnutrición crónica, un alto nivel de vulnerabilidad en seguridad alimentaria y al menos el 50 por ciento de su población en situación de pobreza. Estos distritos están ubicados en todas las regiones del país, excepto Tacna, región que tiene el nivel más bajo de desnutrición crónica infantil en el país, con 3,7 por ciento.

“La meta es reducir hasta en un 13 por ciento la desnutrición crónica infantil”, señaló la ministra de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), Carolina Trivelli.

El gobierno había anunciado como meta para el final de su gestión, en el año 2016, la reducción de la desnutrición crónica infantil a un 10 por ciento a nivel nacional. El reciente anuncio de la ministra Trivelli de reducir la desnutrición infantil en 13 puntos –actualmente es de 19,5 por ciento- implica una nueva meta de reducción a 6,5 por ciento, lo que constituye una buena noticia para los niños del país.  

“Este compromiso nos obliga a que cada sector rinda cuentas de cómo ha avanzado en esta tarea para que las intervenciones sean efectivas. También nos obliga a rendir cuentas de manera periódica a toda la ciudadanía de los avances logrados”, aseguró la titular del MIDIS.

El reto de la articulación

Aníbal Velásquez, director de Seguimiento y Evaluación del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, le señaló al Blog Inversión en la Infancia que la norma para mejorar la articulación intersectorial e intergubernamental en la lucha contra la desnutrición crónica infantil “quiere terminar con las acciones individualistas que cada sector ha venido trabajando durante muchos años y así poder mejorar los índices de desnutrición crónica que presenta el país”.

“Un aspecto importante es el énfasis que se pondrá en las múltiples causas que tiene la desnutrición crónica infantil en nuestro país. Los temas como educación y salud son vitales para poder terminar con este flagelo”, indicó Velásquez.

Entre las intervenciones que se realizarán se contempla la promoción de la lactancia materna, alimentación complementaría, acceso al agua segura y saneamiento, suplementos de alimentos con calorías y proteínas para gestantes, consejería nutricional en áreas de inseguridad alimentaria, entre otros.

Para el antropólogo y miembro del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia, Carlos Eduardo Aramburú, la decisión de adoptar acciones para mejorar la articulación “está en la dirección correcta”, pero implica “grandes retos”.

“Hay que terminar con dos grandes obstáculos para una adecuada articulación: uno es acostumbrar a los sectores, que siempre han trabajado de forma independiente, a colaborar y trabajar de manera conjuntos; el segundo reto, más importante aún, es que esa articulación tiene que darse sobre todo a nivel local. Es indispensable que los gobiernos locales tengan el protagonismo, porque son el eslabón más débil de la cadena. Es a nivel local donde finalmente los programas se concretan, sobre todo si queremos trabajar temas relacionados a la primera infancia”, sostuvo Aramburú.

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