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1 millón 900 mil personas viven en pobreza extrema

Pobreza se redujo de 30,8 a 27,8 por ciento el último año, pero hay 8 millones 300 mil peruanos pobres

El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) informó que la pobreza a nivel nacional se redujo de 30,8 por ciento en el 2010 a 27,8 por ciento en el 2011, es decir 790 mil personas han dejado de ser oficialmente pobres, sin embargo en el país todavía hay 8 millones 300 mil peruanos que viven en situación de pobreza. En el caso de la pobreza extrema, en el mismo período ésta se redujo de 7,6 por ciento a 6,3 por ciento a nivel nacional, lo que implica que 362 mil personas dejaron de ser pobres extremos, pero 1 millón 900 mil peruanos siguen en la pobreza extrema.

La nueva medición de la pobreza entregada el 30 de mayo por el INEI muestra que se mantiene la amplia brecha entre la población urbana y rural. Mientras la pobreza urbana es de 18 por ciento –el año 2010 había sido de 20 por ciento- la pobreza rural se eleva a 56,1 por ciento, en el 2010 había sido de 61 por ciento.

Regiones con mayor pobreza

Las cinco regiones del país que tienen los índices más altos de pobreza son Apurímac, Cajamarca, Huancavelica, Huánuco y Ayacucho, con un nivel de pobreza entre 53 y 57 por ciento. A continuación se encuentran Loreto, Amazonas, Pasco, Puno y Piura, que tienen entre el 35 y 48 por ciento de su población en situación de pobreza.

De acuerdo al informe del INEI, el área rural de la sierra del país continúa siendo la zona más afectada por la pobreza, con un 62 por ciento de su población en situación de pobreza. Del otro lado, es en la costa urbana donde se presenta el menor índice de pobreza: 18 por ciento. Esta brecha no solamente no ha disminuido, sino que se amplió ligeramente en el último año, en el que la pobreza en la costa urbana bajó cinco puntos porcentuales, mientras en la sierra rural descendió 4,7 puntos.

El informe del INEI pone en evidencia la relación entre pobreza y nivel educativo. El 50 por ciento de los pobres y el 69 por ciento de los pobres extremos mayores de 15 años de edad, solamente tienen un año de estudio de educación primaria o no poseen ningún tipo de educación.

El 80 por ciento de las personas que viven en pobreza trabajan en microempresas  o en actividades relacionadas con la agricultura, la pesca y la minería.

Pobreza extrema

En el caso de la pobreza extrema, ésta es casi quince veces mayor en la zona rural que en la zona urbana. Mientras en las ciudades la pobreza extrema es del 1,4 por ciento, en las áreas rurales llega hasta el 20,5 por ciento. Las regiones con los mayores niveles de pobreza extrema son Cajamarca, Apurímac y Huánuco, que tienen entre el 20,2 y el 24,3 por ciento de su población viviendo en condiciones de extrema pobreza.

“En el último año, de cada mil personas que viven en el área rural 205 se encuentran en situación de extrema pobreza, mientras que en el área urbana 14 de cada mil son pobres extremos”, señaló el jefe del INEI, Alejandro Vílchez, durante la presentación de los resultados “Evolución de la Pobreza 2007-2011”.

Pobreza monetaria

El INEI mide la pobreza de acuerdo a los ingresos monetarios. Se considera en situación de pobreza a las personas que tienen un ingreso de 272 soles mensuales o menos. Quienes tienen un ingreso superior a ese monto no son considerados oficialmente pobres. La pobreza extrema está determinada, según el INEI, por un ingreso mensual de 143 soles o menos.

Esta medición de la pobreza no considera otros factores de pobreza, como acceso a servicios básicos de agua y saneamiento, a educación, a servicios de salud. Según el INEI, Madre de Dios es la región del país con el nivel más bajo de pobreza, el cual no supera el 6 por ciento. Sin embargo, analizando otros factores de calidad de vida, vemos que en Madre de Dios el 49,7 por ciento de las viviendas no tiene una fuente segura de saneamiento y el 34 por ciento no tiene servicio de agua potable, el 11,9 por ciento de los niños menores de cinco años sufren de desnutrición crónica y el 58,3 por ciento de los niños entre 6 meses y tres años de edad tienen anemia.

Esto nos revela que ser considerado oficialmente no pobre por el INEI no asegura, necesariamente, una calidad de vida mínimamente adecuada, con acceso a servicios básicos fundamentales.





 





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