Se debe garantizar la nutrición, salud e higiene de los niños y niñas en situación de emergencia

Tras una situación de emergencia causada por desastres naturales o terremotos, los servicios básicos como: agua, desagüe y luz, colapsan. Esto produce, entre otras cosas, la aparición de diversas enfermedades infecciosas y diarreicas (cólera, fiebre tifoidea, entre otras) por la falta de aseo. En este contexto los más afectados son los niños y niñas.

El Grupo Impulsor Inversión en la Infancia promueve y busca generar conciencia sobre las necesidades básicas que tienen los niños y niñas en estado de emergencia. Por ello, se ha elaborado una cartilla informativa de acciones que se deben tomar en cuenta para garantizar, y proteger la salud y nutrición de la infancia.

En una situación de emergencia, se debe priorizar la preparación de alimentos nutritivos y adecuados para las madres gestantes, así como para los niños y niñas, en especial para los niños menores de 3 años. Esto para garantizar su desarrollo integral y evitar que sufran de anemia y desnutrición crónica. 

Es importante, que en medio de esta situación se priorice también la práctica de la lactancia materna exclusiva hasta 6 meses, porque protege a los niños contra infecciones y los mantiene fuertes. 

Sobre la importancia de la lactancia materna, el presidente de la Asociación Peruana de Pediatría, Abel Salinas, precisó que las inundaciones traen enfermedades infecciosas, lo cual acarreará más desnutrición y anemia. “Por eso hay que priorizar los beneficios de la lactancia materna, que mantienen al niño hidratado. Es necesario sumar esfuerzos para atender mejor a la infancia en situación de emergencia", dijo. 

Además, es vital que el Estado garantice para los niños y niñas el cumplimiento del esquema de vacunación completo, para protegerlos de enfermedades como sarampión, entre otros problemas de salud.

En este contexto, también es importante, saber cómo cuidar la higiene de la infancia, en medio de situación de emergencia. Lo fundamental es promover las prácticas de higiene, como el lavado de manos, sobre todo entre las madres gestantes y los niños.

Asimismo, se debe enseñar a los padres a purificar el agua, usando gotas de lejía y dejando reposar por 30 minutos. 

Es importante que la sociedad civil y gobiernos locales, sigamos fomentando la donación de agua embotellada, así como artículos de aseo e higiene como pañales para los bebés y niños menores de tres años, jabón en líquido, cepillo de dientes, pañitos húmedos,  entre otros productos.

Si bien es cierto las emergencias naturales nos dejan vulnerables debemos ser fuertes para sacar adelante a nuestra infancia por lo tanto todos debemos decir: #UnaSolaFuerza por la Infancia.