Es necesario supervisar actividad física de los niños para evitar problemas cardiacos

Hacer deporte es una de las actividades favoritas de los niños y además es algo recomendable por los doctores, pues trae una serie de beneficios en la salud de los niños, como prevenir la obesidad, bajar la posibilidad de tensión arterial, mantener adecuados niveles de glucosa, entre otros.  Sin embargo, existe un serio riesgo si estas actividades no son supervisadas por  un adecuado control médico: enfermedades del corazón.

El prolongado esfuerzo físico al que están sometidos los niños que practican deporte con regularidad, aumenta el riesgo de muerte súbita en niños y adolescentes que padecen enfermedades cardiológicas congénitas, las cuales normalmente no son diagnosticadas y que muchas veces, tanto padres como hijos desconocen de su existencia.

La actividad deportiva en algunos casos extremos desencadena un paro cardiaco. Para evitar esto, en España la Agencia de Protección de la Salud en el Deporte obliga a someterse a reconocimientos médicos antes de matricular a un niño en alguna actividad deportiva que requiera un gran esfuerzo, como practica r de forma constante un deporte de alto nivel todos los días.

En España se pretende implantar la obligatoriedad de estos exámenes a niños a partir de 6 años, al inicio de la actividad deportiva con revisiones cada dos años, sobre todo en los deportes de más exigencia física como atletismo, fútbol, natación, baloncesto tenis o ciclismo. El objetivo es diagnosticar enfermedades del corazón que pueden suponer un riesgo importante cuando se unen al deporte de alta intensidad.  De acuerdo a los cardiólogos, es importante que los padres de los niños realicen pruebas a sus hijos, que permitan diagnosticar cardiopatías a tiempo.

Para evitar posibles daños al corazón, la Fundación Española del Corazón recomienda  graduar el esfuerzo físico de los niños de acuerdo a su edad. En menores de 8 años lo mejor son los ejercicios de psicomotricidad, coordinación y equilibrio, como, saltar, trepar, danzar. Desde los 8 a los 12 años, ejercicios que contribuyan al crecimiento y desarrollo general, aumentando las actividades diarias, y desarrollando las principales cualidades físicas (resistencia, fuerza y flexibilidad).

Entre los 12 y 14 años se recomienda entrenar la técnica de cada movimiento deportivo y comenzar algún tipo de competición que mantenga la motivación a través del juego; mientras que luego de los 14 años se puede comenzar el entrenamiento más especializado, aumentando los niveles de carga.