Preocupante disminución de la lactancia materna

Cada año, aproximadamente 320 mil recién nacidos, la mitad de los niños que nacen anualmente en el país, no acceden a la lactancia materna en la primera hora de vida, a pesar de ser esto clave no solamente para un mejor desarrollo del niño, sino también para disminuir la mortalidad neonatal. En el país hay una preocupante disminución de la lactancia materna y su reemplazo por fórmulas de leche artificial, especialmente en las grandes ciudades, como Lima Metropolitana.

En el último año, a nivel nacional la lactancia materna exclusiva en los primeros seis meses de vida del recién nacido bajó de 70,6 por ciento en el año 2011 a 67,6 por ciento en el 2012. En el ámbito urbano, entre 2011 y 2012, el índice de recién nacidos que reciben lactancia materna exclusiva descendió de 64 por ciento a 61,8 por ciento, mientras en la zona rural, que entre 2007 y 2010 había tenido un incremento de más de siete puntos porcentuales de la lactancia materna exclusiva, bajó de 82,5 por ciento a 78,6 por ciento.

El mayor descenso se ha dado en las principales ciudades del país. En Lima Metropolitana es donde se registra la mayor baja en la lactancia materna exclusiva entre los recién nacidos. Entre 2007 y 2010, en Lima Metropolitana los recién nacidos que reciben lactancia materna exclusiva por seis meses bajó de 60 por ciento a 49,1 por ciento.

De acuerdo a la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (ENDES), en el 2012 la lactancia materna exclusiva es mayor en la sierra y la selva que en la costa. Mientras en la sierra y la selva el 76,3 por ciento de los niños reciben lactancia materna exclusiva en los primeros seis meses de vida, en la costa baja al 57,5 por ciento.

La licenciada en nutrición y miembro de la Red Peruana de Lactancia Materna, Nair Carrasco, señala que la disminución de la lactancia materna se debe a tres factores: que los servicios de salud no cumplen con dar información ni con los pasos necesarios para la lactancia del niño, que los haría acreedores de la certificación internacional como Hospitales Amigos de la Madre y el Niño; que el niño no es puesto en el vientre de su madre durante la primera hora de nacido, de cada dos niños solamente uno accede a este contacto temprano con la madre, que es fundamental; y que inmediatamente después de nacer los niños reciben leches artificiales en lugar de leche materna. “Estos tres factores han ido afectando los servicios de la práctica de lactancia en los centros de salud”, dice Nair Carrasco.

“Dar información pertinente sobre la importancia de la lactancia materna a todas las madres durante la gestación es un paso que se debe cumplir, pero no se está cumpliendo, y si se cumple es muy pobre. La información es desactualizada durante el control pre natal. Lo importante es que las madres puedan tomar decisiones informadas”, afirma Nair Carrasco.

Entre 1992 y 1998 el Ministerio de Salud certificó a 90 hospitales como amigos de la madre y el niño por su trabajo en la promoción y apoyo de la lactancia materna, pero ese trabajo no se ha sostenido y actualmente solamente hay cuatro hospitales a nivel nacional que han sido recertificados, y estos cuatro hospitales se encuentran Lima. Nair Carrasco asegura que hay una falta de actualización sistemática para que el personal de salud cuente con todas las herramientas para poder apoyar efectivamente a la mamá en la tarea de dar de lactar a su hijo recién nacido.
 
La lactancia materna es considerada fundamental para disminuir la mortalidad entre los recién nacidos. Y es clave que la lactancia se inicie durante la primera hora de vida. Entre los riesgos que implica para el niño no recibir leche materna exclusiva en los primeros seis meses de vida están la desnutrición, ser víctima de infecciones, diarreas y alergias. Por eso es tan importante que la lactancia materna se dé de una manera más amplia en todos los niños. Carrasco asegura que la disminución de la lactancia materna también influye en el incremento de la violencia.

“Debido a que en las zonas urbanas está disminuyendo la lactancia materna, es muy probable que en poco tiempo veamos un incremento de la violencia. Un niño que está apegado al vientre de su madre, sobre todo en la primera hora de vida, establece un vínculo amoroso, libre de violencia. Los niños que reciben lactancia materna tienen menos propensión a la violencia” indica Nair Carrasco.

Las empresas y la ley

Existe un Reglamento de Alimentación Infantil, actualizado con Decreto Supremo N 009-2006-SA, que regula la promoción del consumo de las leches artificiales sucedáneas de la leche materna, y que prohíbe la donación o venta a precios reducidos de esta leche artificial a instituciones públicas o privadas de atención al recién nacido y lactante.

Nair Carrasco advierte que “las compañías comercializadoras de fórmulas de leche artificial violan el Reglamento de Alimentación Infantil, ya que no pueden entregar esta leche artificial que reemplaza la leche materna en los servicios públicos y privados, sin embargo en estos centros de salud se entregan estas fórmulas de leche artificial, se promociona su uso entre las madres de los recién nacidos y las empresas otorgan una serie de beneficios parta que los médicos y profesionales de salud impulsen el consumo de estas fórmulas de leche artificial en lugar de la lactancia materna”.

“También violan la ley –indica Carrasco- con la publicidad que hacen en los medios de comunicación y que no corresponde a la verdad, porque inducen a consumir un producto que aparentemente genera un mejor coeficiente intelectual en el niño, cuando sabemos que eso no es así”.

Nair Carrasco señala que “corresponde a INDECOPI hacer cumplir el reglamento que regula la comercialización de esta leche artificial sustituta de la leche materna”, pero precisa que “a pesar del incumplimiento de este reglamento por parte de las empresas que producen esta leche artificial, hasta ahora INDECOPI no ha sancionado a una sola empresa”.