Expertos opinan sobre el Plan Nacional de Acción por la Infancia y la Adolescencia 2012-2021

El Gobierno ha presentado el Plan Nacional de Acción por la Infancia y la Adolescencia 2012-2021, que establece metas como la reducción de la desnutrición crónica infantil en niños menores de 5 años al 5 por ciento y universalizar la educación inicial en niños entre 3 y 5 años. Sobre este tema opinan José Rivero, miembro del Consejo Nacional de Educación y del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia; Federico Arnillas, presidente de la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza; Gloria Helfer, ex ministra de Educación y también miembro del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia; y Gloria Gonzales, directora del proyecto educativo Kusiwarma.

José Rivero, miembro del Consejo Nacional de Educación y del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia

“Es sorprendente que un Plan Nacional de Acción por la Infancia y Adolescencia 2012-2021 de largo plazo como este se elabore en tan poco tiempo y sin ninguna publicidad. Si bien se señala que ha sido conversado con instituciones estatales y no estatales, no creemos que un Plan que va a regir hasta el 2021 se deba elaborar de esa forma. Mi referente en el Proyecto Educativo Nacional, participé en su elaboración por el Consejo Nacional de Educación y el esfuerzo que hicimos con dialogar con regiones, con docentes, con diversas instituciones durante 3 años da una pauta de lo que tendría que haberse hecho para lograr un Plan de esta naturaleza. Los objetivos son loables e importantes, pero tenemos que preguntarnos qué pasó con los planes anteriores. No ha habido un informe de los distintos primeros ministros sobre los avances del Plan anterior, a pesar de que eso está establecido legislativamente. Entonces, más allá del contenido del Plan, que es importante, me preocupa el procedimiento y el que la ciudadanía no sea consciente del mismo. Me parece que el tema de la niñez y la adolescencia ameritaba un mayor entendimiento, una mayor apertura a un diálogo ciudadano y una difusión mucho más amplia. El presupuesto tiene una gran limitación. En el Plan no surge una cabeza visible del Estado a cargo de la infancia. No creo que el Ministerio de la Mujer sea el organismo idóneo para esto, menos ahora con facultades recortadas. No se ha cumplido lo que el Grupo Impulsor Inversión en la Infancia está demandando hace buen rato: la necesidad de que haya una cabeza visible a favor de la infancia que pueda coordinar intersectorialmente, que pueda ser escuchada por los sectores y lograr una estrategia integral y efectiva. Tanto el presupuesto como las acciones demandan aquello. Por otro lado, hasta el año 2021 el Plan plantea reducir al 5 por ciento la desnutrición crónica infantil, me parece que sería más importante definir que no queremos desnutrición crónica en el país, no podemos contentarnos con que haya un solo niño desnutrido. Tengo serias dudas sobre el cumplimiento de las metas establecidas en este Plan, sobre todo si no son metas encarnadas en la población, en el imaginario colectivo. Este es un Plan que necesitaba más discusión y participación para definir compromisos reales”.


Federico Arnillas, presidente Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza

“El Plan Nacional de Acción por la Infancia y Adolescencia 2012-2021 ha tenido en su proceso de elaboración algunos mecanismos de consulta, se ha recogido la opinión de diversos actores del sector público y de la sociedad civil. Eso es importante porque permite tener una visión más multisectorial para el éxito de este Plan. El desafío urgente es retomar los compromisos escritos por las autoridades regionales en su condición de candidatos en el año 2010 para incorporarlos en planes regionales y locales. Las metas nacionales se alcanzan siempre y cuando en cada localidad y región logremos cambios y mejoras en la situación de la infancia, eso es lo que hace posible el logro de las metas nacionales. La tarea está en este mecanismo de metas locales y regionales alineadas con las metas nacionales. Un tema clave para la acción del Plan es el tema del presupuesto. Hay que seguir insistiendo que a lo largo del año se asignen recursos y que ese dinero esté disponible oportunamente, y que los procesos administrativos sean agilizados. La asignación presupuestal es uno de los temas del seguimiento y eso es lo que estamos trabajando en la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza. Nosotros estamos haciendo un seguimiento de la asignación y de la ejecución de los recursos. Ese es un punto importante para ver cómo va marchando el cumplimiento de este Plan y para ver también de quién es la responsabilidad si hay o no dinero, si este dinero se ha comprometido o no, y si el nivel de ejecución de lo comprometido es adecuado. De esa cadena parte la posibilidad de que el Plan se cumpla.”


Gloria Helfer, ex ministra de Educación y miembro del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia

“El Plan tiene muchos aspectos positivos porque aborda el tema de la infancia y de la adolescencia integralmente, pero para cumplir los planes se tienen que dar determinadas condiciones. Es en la parte en la que se establece cómo se va a cumplir con este Plan donde tengo una seria preocupación, porque reiteradamente se dice que es con participación público-privada, con la participación de los empresarios, que se van a enfrentar los problemas gravísimos que se señalan en el diagnóstico. En mi opinión estos problemas sociales graves de los pobres y más pobres tienen que ser asumidos por el Estado. Los empresarios lo que tienen que hacer es pagar sus impuestos. No se puede creer que el empresario de la zona vaya a resolver el tema de la desnutrición o del embarazo temprano en una alianza público-privada. Por otro lado, se tiene que señalar quién es responsable de qué, quién tiene autoridad. Con respecto a la participación ciudadana, he participado en algunas reuniones pero el problema es que esos acuerdos tienen que resumirse en pactos, justamente para determinar las responsabilidades. De esa manera se podría generar alianzas. La parte presupuestal para este Plan es muy reducida”.


Gloria Gonzales, directora del proyecto educativo Kusiwarma

“Es un avance que se haya aprobado el Plan Nacional de Acción por la Infancia y Adolescencia 2012-2021, porque el anterior Plan ya acabó. Este Plan se está trabajando desde hace muchos meses atrás y no se aprobaba, por eso es que diversas instituciones que trabajamos en primera infancia presionamos para que salga este Plan. Creo que hay metas ambiciosas, como reducir la desnutrición crónica en menores de 5 años al 5 por ciento, existen programas que están gestionando eso, sin embargo hay metas que no sé en el marco de qué Plan se articulan, como reducir la violencia familiar en niños, niñas y adolescentes. No se sabe cómo se va a lograr esta meta y cuál es la institución que se va a encargar. Por otro lado, hay aspectos que no están considerados. En el trabajo que hacemos con niños menores de 3 años no vemos que se establezca una meta para el acceso en niños menores de 3 años a algún programa educativo. Como sabemos, la educación inicial es de 0 a 5 años y el primer nivel va de 0 a 2 años. Creemos que en ese punto hay una deficiencia porque el Plan se refiere a la educación inicial solamente para los niños de 3 a 5 años, y los primeros años de vida van a repercutir en todo el proceso de desarrollo y aprendizaje del niño. Con respecto  a una consulta ciudadana, siempre se puede hacer más, los mecanismos deberían llegar a todos los involucrados con el tema infancia para que participen en la construcción del Plan Nacional de Acción por la Infancia y Adolescencia 2012-2021”.